(Viena, 02 de junio. AFP).- Ante el nuevo panorama de precios bajos del petróleo, Venezuela está buscando apoyos fuera de la Opep para estabilizar el mercado, indicó el gobierno de Caracas este martes en un comunicado fechado en Viena.
El ministro de Petróleo y Minería, Asdrúbal Chávez se encuentra en la capital austríaca para participar el viernes en la reunión semestral del cartel, que deberá decidir si mantiene o no su techo oficial de producción en 30 millones de barriles diarios (mbd).
Venezuela y otros países de la Opep como Argelia y Libia han pedido últimamente que la organización recorte su producción, para hacer subir los precios del crudo, que están lejos de poder equilibrar sus respectivos presupuestos.
Dicho recorte parece sin embargo poco probable, con una Arabia Saudí y sus tres socios más estrechos (Kuwait, Catar y Emiratos Árabes Unidos) decididos a defender sus partes de mercado y no tanto los precios.
Según la nota del gobierno venezolano recibida por la AFP, Caracas propone “establecer un grupo técnico de trabajo permanente Opep – No Opep, para el monitoreo continuo del mercado”.
El objetivo de dicho grupo técnico, añade, es “generar las recomendaciones para la efectiva toma de decisiones de los países productores”.
El texto no llama explícitamente a que la Opep recorte su techo oficial de producción, e incide en que para el ministro Chávez, “la mejor forma de estabilizar el mercado es el consenso y la cooperación activa de todos los productores“.
“El Gobierno venezolano ha promovido iniciativas para lograr consenso entre los principales países miembros de la OPEP y los demás productores No Opep, en la búsqueda de puntos en común para la definición de políticas energéticas conjuntas que busquen estabilizar el mercado”, explica el texto.
En los últimos meses, el sector petrolero ha estado atento a un posible acuerdo entre la Opep y otros grandes países productores, para proceder a un recorte coordinado de la producción y que el peso de la decisión no recaiga por completo en el cartel de 12 países.
Sin embargo, de momento no han cuajado dichos contactos con países como Rusia o México, país este último que se esfuerza en atraer capital extranjero como parte de su reforma energética tras abrir el sector a la inversión privada.