Jennifer Lawrence ha querido rendir tributo al líquido que compone las tres cuartas partes de nuestro cuerpo tatuándose la fórmula química del agua -H2O- en la mano.
“No es un tatuaje de verdad. Más bien pensé: ‘Siempre voy a necesitar estar hidratada. Así que supongo que debería ponerme H2O en la mano’. Es, literalmente, el tatuaje menos rebelde que te puedes hacer”, explicó Jennifer al portal HitFix.
Desgraciadamente la intérprete no ha quedado del todo satisfecha con el resultado final, ya que al tatuador se le olvidó que el número 2 debía ser escrito como subíndice y le grabó la fórmula química de manera incorrecta.
“Debería haber buscado en Google antes de tatuarme algo en mi cuerpo para siempre”, añadió.
A Jennifer no le importan las repercusiones profesionales que pueda acarrearle su nuevo tatuaje porque es consciente de que a la industria del cine “no le importa” la apariencia de los actores una vez han alcanzado la fama.
“Tuve una conversación con alguien sobre el tema del peso en la industria. Ya sé que es algo de lo que hablo sin parar. La cuestión es que me dijeron: ‘Las estrellas de las películas no están muy delgadas’, y yo contesté: ‘Sí, porque una vez que llegas a un cierto nivel la gente te va a contratar sí o sí. Solo quieren tenerte en su película, así que no les importa tu aspecto‘. Quienes tienen que luchar son los actores y actrices que no tienen todavía una cierta reputación, ellos son los que soportan mucha presión”.