Un poderoso sismo golpea la costa de México, los sensores lo detectan y en cuestión segundos estaciones de radio, altavoces en las calles y aplicaciones telefónicas lanzan alertas momentos antes de que la megaurbe de 20 millones de habitantes sea sacudida por el terremoto.
“¡Alerta sísmica! ¡alerta sísmica!”, suena desde la radio con una alarma de fondo y entonces los capitalinos tienen hasta un minuto para huir de sus hogares, oficinas o escuelas, antes de que los edificios se empiecen a mecer por el terremoto con epicentro en la costa del Pacífico. Pero estas tecnologías no existían el 19 de septiembre de 1985, cuando la Ciudad de México fue sacudida por un poderoso sismo de 8,1 grados Richter que en segundos redujo a escombros numerosos edificios acabando con la vida de miles de personas.
México recuerda este sábado los 30 años de la tragedia con un simulacro nacional antisísmico en el que se activaran las alertas, entre ellas las instaladas a través de 8.200 altavoces colocados en las calles de la capital, que se encenderán por primera vez. La asociación civil CIRES ha dotado a la ciudad de un sistema de alertas que automáticamente interrumpe las transmisiones de radio para lanzar las alarmas, tan pronto como, al menos dos de los cien sensores sísmicos instalados en la costa, detectan un sismo superior a 6 grados.
La alerta lanzada desde la costa, a cientos de kilómetros de la capital, corre más rápido que las ondas telúricas para que los mexicanos se pongan a resguardo antes de la sacudida, que se agudiza por el frágil subsuelo de la megaurbe, erigida en partes de un antiguo lago.
Alerta telefónica
La llegada de los teléfonos celulares permite a los “chilangos”, como se conoce a los capitalinos, recibir la alerta en la palma de su mano mediante aplicaciones como SkyAlert y Alerta Sísmica DF. En cuanto se detecta el sismo, en dos segundos SkyAlert lanza una señal a los teléfonos con una sonora alarma y la advertencia “¡alerta sísmica!” mientras en la pantalla aparece la intensidad del temblor.
“Este tipo de sistema implica una gran responsabilidad”, comenta a la AFP Alejandro Cantú, de 29 años y fundador de SkyAlert, que cuenta con tres millones de usuarios. “Cuando te despiertas cada mañana y vas a trabajar, asumes un compromiso con tu país y tu gente”, añade el creador de esta aplicación lanzada en 2013 y que inicialmente estuvo conectada a CIRES.
Cantú viajó a Japón y regresó con tecnología de punta en materia de alerta sísmica, lo que le permitió independizarse de CIRES. En mayo, los usuarios empezaron a pagar 59 pesos anuales (3,5 dólares) por personalizar sus alertas y ya suman 30.000 los clientes que pagan. En julio de 2014, SkyAlert lanzó una falsa alerta causando sobresalto a sus usuarios. Entonces estaba conectada a CIRES, a la que Cantu culpa del fallo, pero la asociación señala que fue responsabilidad de la firma.
Fuente: AFP