Después del informe que presentó el jefe de la misión de paz de la ONU en Mali (MINUSMA), Hervé Ladsous, sobre la situación en el país, el Consejo de Seguridad aseguró que todas las partes que firmaron el acuerdo de paz de junio tienen la responsabilidad de conseguir que esta paz sea duradera.
El gobierno de Mali, con el apoyo de la MINUSMA, ha estado tratando de restaurar la estabilidad y reconstruir el país después de las turbulencias que estallaron a principios de 2012, incluyendo un golpe de Estado militar y nuevos enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y los rebeldes Tuareg.
En un comunicado, los miembros del Consejo urgieron al gobierno de Mali y a los grupos armados a dar prioridad a las disposiciones clave del acuerdo, con el fin de llevar los beneficios de la paz a la población.
También les instó a tomar las medidas necesarias para desplegar patrullas de seguridad en el norte así como desarmar e reintegrar a los ex combatientes en la sociedad, conforme progresa el proceso de descentralización.
Repetidas violaciones del acuerdo de alto el fuego firmado por el gobierno y las coaliciones de grupos armados Plataforma y Coordinación han provocado que la seguridad se haya deteriorado considerablemente en Mali.