Ante la oleada de despidos en Argentina, promovida el gobierno de Mauricio Macri, la ex mandataria Cristina Fernández consideró que la única alternativa es que el sindicalismo se plante en defensa de los derechos de la clase obrera.
A través de un vídeo publicado en redes sociales, desde El Calafate, ciudad ubicada en la Patagonia, Santa Cruz, Argentina, Fernández dirigió su mensaje especialmente a los dirigentes sindicales: "Defiendan con tanta fuerza a sus trabajadores y representados como lo hicieron durante nuestros gobiernos", en referencia a las gestiones de Néstor Kirchner (2003-2007) y la suya, que contó con dos períodos entre 2007 y 2015.
La militante peronista recordó que mientras el año pasado los reclamos eran por el impuesto a las ganancias, que pechaba tanto a empresas como a personas con alto poder adquisitivo, el gobierno macrista ahora pone a los argentinos en la encrucijada de tener que defender su empleo: "Van a tener que pelear por mantener sus puestos de trabajo".
Desde la llegada de Macri a la Casa Rosada, sede de Gobierno de Argentina, se han efectuado despidos en la municipalidad de La Plata (4.500 empleados), en el Senado (2.035), en la municipalidad de Quilmes (1.000), en el Centro Cultural Kirchner (600) y en la Jefatura de Gabinete (150).
La más reciente medida de Macri fue anular el decreto de coparticipación firmado por Fernández, que obligaba al Estado a devolver 15% de la masa de impuestos nacionales retenida a las provincias. El argumento del actual presidente argentino es que "se compromete" el presupuesto asignado a la Seguridad Social.
La exmandataria pidió "mucha fuerza a los dirigentes sindicales", de cara a las próximas exigencias que deberán hacer al gobierno derechista de Macri.
"Esto es parte del crecimiento de la democracia, tenemos que defender nuestras propias conquistas y nuestros propios logros", cerró Fernández, ante los vítores de varias personas que se encontraban en El Calafate. avn