Las acciones de Renault se han desplomado este jueves hasta un 20% en la Bolsa de París después de que se supiera que la justicia francesa ha registrado varias sedes del grupo automovilístico. El sindicato CGT ha informado de que agentes de la Dirección General de la Competencia, del Consumo y de la Represión del Fraude investigan los departamentos de "homologación y puesta a punto de los controles del motor". Según esta central sindical, las pesquisas podrían estar relacionadas con "las consecuencias delcaso de los motores trucados de Volkswagen", en referencia al trucaje de los motores llevado a cabo por la automovilística alemana para falsear las emisiones de gases contaminantes.
Varios funcionarios de la oficina de fraude del Ministerio de Economía de Francia se habrían personado en varias instalaciones de la compañía automovilística el pasado 7 de enero con el fin de revisar los estándares de las pruebas y de certificación de los motores, según ha trascendido este jueves. "Se están llevando a cabo pesquisas en varias oficinas de Renault", explica Florent Grimaldi en declaraciones a la agencia Reuters. "La dirección no ha confirmado aún si se trata o no de las emisiones de óxido de nitrógeno, pero a la vista de las unidades en las que se han centrado los investigadores creemos que podría estar vinculado", añade.
El desplome bursátil de Renault, el peor en más de 12 años, arrastra también al segundo constructor francés, PSA Peugeot Citroën, cuyos títulos caían un 8,81% a media sesión. EL PAIS