Las oficinas en Colombia de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) y del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos manifestaron hoy creciente preocupación por las violaciones de las garantías básicas que sufre desde marzo último la población del Departamento del Chocó, que han ocasionado el desplazamiento forzado de más de 6 mil personas y la restricción de movilidad de más de 7 mil.
Un comunicado conjunto de esas oficinas afirma que la situación es resultado de los enfrentamientos entre grupos armados ilegales y otras acciones armadas en el marco del conflicto armado interno.
Ambas oficinas consideraron que para prevenir el impacto sobre la población civil es esencial que las partes del conflicto cumplan con todas sus obligaciones bajo el Derecho Internacional Humanitario y en particular aquellas de no establecer bases cerca de asentamientos de población civil y de no realizar bombardeos que pongan en riesgo a esta población.
Según el texto, la mayoría de los desplazados son indígenas y afrocolombianos, que se han trasladado a las cabeceras municipales en busca de protección y refugio.