La Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba) rechazó el golpe de Estado cometido en Brasil, contra la presidenta Dilma Rousseff, a través de un comunicado oficial.
Vea el comunicado oficial a continuación:
El ALBA-TCP rechaza enérgicamente el golpe en BrasilLos países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos, ALBA-TCP, informados de la votación ocurrida en el día de ayer en el Senado de Brasil, rechazamos enérgicamente el golpe de Estado parlamentario-judicial que está camino de consumarse en ese país.El juicio político contra la presidenta legítima Dilma Rousseff es una maniobra, disfrazada de legalidad, para apartarla de su cargo y desacreditarla a ella y al Partido de los Trabajadores (PT), sin que existan razones legítimas ni fundamentos jurídicos para ello.Sectores oligárquicos, con el respaldo de intereses imperialistas, de las transnacionales y de grupos mediáticos, pretenden reinstaurar el neoliberalismo en Brasil y en otros países de nuestra región, alinear la política exterior brasileña con los intereses imperiales y desmantelar los programas sociales de los gobiernos del PT, que han beneficiado ampliamente a millones de ciudadanos brasileños, como nunca antes en la historia de esa hermana nación, en áreas como la alimentación, la salud, la vivienda y la educación.Este atentado contra la voluntad popular de millones de brasileños expresada en las urnas, es una nueva expresión de la contraofensiva reaccionaria dirigida a derrocar a los gobiernos que han favorecido a los más necesitados y si se consuma definitivamente, amenazaría la democracia, la paz y la estabilidad en Brasil y en nuestra región, y con ello la vigencia de la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, adoptada por los Jefes de Estado y de Gobierno en la II Cumbre de la CELAC, en La Habana, en el año 2014.Los países del ALBA-TCP expresamos nuestra más firme solidaridad a la presidenta Dilma Rousseff y al líder del Partido de los Trabajadores Luiz Inacio Lula Da Silva, también sometido al acoso de la derecha, y reiteramos nuestro apoyo al valiente pueblo brasileño, que ha salido a las calles a rechazar esta abominable acción.