El inspector general interino del departamento de Seguridad Nacional de EE.UU., Charles K. Edwards, admitió que los carteles mexicanos de narcotráfico -como "Los Zetas"- corrompen a algunos agentes estadounidenses en zonas fronterizas.
El objetivo, dijo, es continuar con el contrabando ilícito de drogas y personas.
En una audiencia frente al Senado de EE.UU., Edwards admitió que los carteles "han comenzado a reclutar y corromper a empleados" del Departamento de Seguridad Nacional", entre ellos agentes de la Patrulla Fronteriza y de la Oficina de Aduanas y Fronteras.
Según las investigaciones, los sobornos se llevan a cabo en efectivo y con favores sexuales.
En la audiencia legislativa, funcionarios sostuvieron que desde 2004, 127 agentes fronterizos o de aduanas han sido arrestados o procesados por actos de corrupción.