La actividad eruptiva del volcán chileno Puyehue disminuyó en los últimos días. Y tanto en Bariloche como en Villa La Angostura, las dos ciudades más golpeadas, ya trabajan para reducir el impacto ambiental y económico que ocasiona la lluvia de cenizas.
Mañana, desde las 9, en Bariloche se llevará a cabo la primera jornada solidaria para limpiar la ciudad. La iniciativa de los vecinos (que aportarán elementos de trabajo y protección) está coordinada por la Subsecretaría de Servicios y Obras Públicas local, organismo que provee camiones, volquetes, máquinas y otros elementos de la infraestructura municipal para la realización de estas tareas.
“Queremos aportar tranquilidad y confianza tanto a quienes hoy están sufriendo las consecuencias de la nube de cenizas volcánicas como a quienes tienen previsto vacacionar en el sur argentino: aerolíneas, operadores, hoteleros, gastronómicos y todos los que estamos involucrados en el sector, estamos trabajando sin descanso para generar soluciones concretas para cada destino”, destacó Oscar Ghezzi, presidente de la Cámara Argentina de Turismo.
El impacto económico en la región es grave. Desde el 4 de junio, cuando se intensificó la actividad del volcán chileno, en Bariloche se suspendieron el 80% de las reservas que había para la segunda quincena del mes y los primeros días de julio. Esto, sumado a que el aeropuerto estará cerrado por lo menos hasta julio, golpeó fuerte la economía dado que no ingresará el flujo de fondos proveniente del turismo, especialmente del brasileño, principal motor de la cadena invernal de negocios. También, aunque en menor medida ya que el acceso terrestre se encuentra operativo, repercutió sobre el turismo estudiantil y de jubilados.
En Villa La Angostura el panorama también es grave. Un informe de la Cámara de Comercio local estima las pérdidas en 200 millones de pesos. También habla de 900 emprendedores y 3500 puestos de trabajo en riesgo.
Así, las pérdidas en Bariloche y Villa La Angostura rondarán los 600 millones de pesos.
Por su parte, los centros de esquí intentan, con diferente suerte, salvar la temporada. En Caviahue (Neuquén) se muestran aliviados ya que, aseguran, el impacto de las cenizas no fue tan importante y festejan la apertura de las pistas y que, a la fecha, cuentan con un 70 por ciento de reservas. Mientras que Catedral (Bariloche), Cerro Castor (Ushuaia), Chapelco (San Martín de los Andes), La Hoya (Esquel), Las Leñas (Malargüe) y Penitentes (Las Heras)- esperan la llegada de las primeras nevadas.
EL CLARIN