El coordinador nacional de Primero Justicia y diputado a la Asamblea Nacional, Julio Borges, se pronunció sobre el tema carcelario y sobre la grave crisis que se presenta desde hace más de siete días en la cárcel de El Rodeo, al indicar que “el estado de los presos en las cárceles es un reflejo de cómo un gobierno valora a su pueblo, aceptamos y damos la bienvenida al debate sobre el drama penitenciario en la Asamblea Nacional; hay gente que pasa años en los penales sin ni siquiera saber cuándo le van a hacer un juicio”.
“Hoy queremos compartir unas palabras que resumen de forma muy clara la crisis del sistema penitenciario que sufre Venezuela, el problema carcelario es un reflejo de la podredumbre nacional en muchas áreas, un Poder Judicial carcomido por la corrupción, la ineficacia, la insensibilidad; una Fiscalía que durante años no ha cumplido con su obligación de velar por el cumplimiento de los derechos humanos; unas mafias carcelarias que se fueron enquistando allí, que se adueñaron de las cárceles, pero estas palabras no son recientes, estas palabras las pronuncio el Presidente el 4 de octubre de 1999 en su programa Alo Presidente Nº 17. Han pasado 12 largos años y vemos que no se ha hecho absolutamente nada", señaló.
Explicó Borges que desde el primer Aló Presidente el 23 mayo de 1999, el Presidente se refirió al tema de las cárceles venezolanas como un infierno que el mismo había percibido desde muy cerca cuando estuvo en Yare.
“Hace 12 años exactamente, el 20 de junio de 1999 en su Aló Presidente Nº 4 mencionaba lo siguiente: “Las cárceles son como las puertas del quinto infierno. Yo estoy comprometido con todos ustedes, con sus familiares, con su dolor. Ya tenemos un plan que veníamos desarrollándolo antes de llegar al gobierno, y tengo ya un equipo de militares y civiles trabajando en el “Plan Dignidad”, dignidad para los presos. Dignidad para las cárceles, y que se conviertan, de verdad, en sitios donde la gente conviva, donde vivan y no vayan a morir en vida, como son las cárceles venezolanas, que es un sistema, el penitenciario nuestro, de los peores y más salvajes de todo el mundo, incluso peor que muchos regímenes dictatoriales”.
Borges se preguntó ¿En qué quedó ese Plan Dignidad? y aseguró que en nada como el resto de las promesas de todos estos años de Gobierno. Incluso semanas después, en julio de 1999 anuncio el Plan Justicia 2000 para adecentar y humanizar las cárceles, que lamentablemente quedó como otro “show mediático” mas, como el que montaron en enero pasado en las interpelaciones de los Ministros ante la Asamblea Nacional, al afirmar que ya estaban en curso programas de humanización de las cárceles que sabemos no han tenido el impulso necesario y lamentablemente son muestras muy pequeñas de lo que se pudiera hacer y finalmente no se hace”.
El líder de la tolda amarilla aseveró que “desafortunadamente, la situación de las cárceles venezolanas es mucho peor que el infierno que describía el Presidente hace 12 años y que no hizo absolutamente nada para cambiarlo. Actualmente existen unos 44 mil internos mientras la capacidad de los centros penitenciarios no llega a los 15 mil. Estamos hablando que se ha superado 3 veces la capacidad”.
“El hacinamiento se ha agravado en los últimos años y nos coloca, según el Observatorio Interamericano de Seguridad de la OEA, como el país de mayor hacinamiento carcelario de toda América. Hacinamiento que se ha incrementado por el retardo procesal que ha llevado a la insólita situación de apenas un 28% de los privados de libertad les ha sido impuesta una condena por parte de un tribunal, según el Observatorio Venezolano de Prisiones OVP”, enfatizó Julio Borges.
”Y sobre las mafias que tanto repudiaba el Presidente hace 12 años, la situación es ahora mucho peor. ¿Cómo se explica que armas de guerra como las que hemos visto en los procesos de incautación de estos días hayan podido entrar y permanecer “como si nada” en una cárcel? El resultado, muerte y dolor, según el OVP, sólo en 2010 murieron 476 reclusos, y la cifra total de muertes en prisiones desde 1999 se eleva a 4.506”.
“Hay un camino mejor, desde Primero Justicia hemos insistido que esta situación no se resuelve con más burocracia creando un nuevo Ministerio, la propuesta es la descentralización. Las Gobernaciones pueden asumir la administración de los centros penitenciarios, atacar de forma contundente las mafias que se apoderaron de las cárceles, y adecentar realmente los penales”.
En este sentido la tolda amarilla presentó seis propuestas para resolver el drama carcelario: “descentralizar las cárceles, construir cárceles por concesiones, permitir que los presos organizados lleven los servicios internos, involucrar más a las iglesias y ONG, ver experiencias exitosas de otros países y despartidizar la justicia”.
“Adicionalmente, tal como se incluye en nuestra propuesta de Ley Desarme, atacar de forma frontal y contundente a los traficantes de armas en los penales. No se puede seguir permitiendo la entrada indiscriminada de armas a las cárceles, pero eso requiere de verdadera voluntad política y que el gobierno resuelva, ya basta de años y años de promesas y mentiras, los venezolanos queremos resultados, ese es el cambio que merecemos y todos juntos vamos a lograrlo”.