Científicos usan aceite de coco contra la corrosión de oleoductos
Científicos mexicanos desarrollan, con aceite de coco, un recubrimiento contra la corrosión de oleoductos, con el fin de sustituir los productos importados que actualmente utiliza Petróleos Mexicanos (Pemex), informó hoy una fuente oficial.
Este compuesto se encuentra en etapa experimental pero "ha demostrado ser competitivo" frente a los productos comerciales que existen en otros países como Inglaterra, explicó Jorge Ascencio, responsable del proyecto en un comunicado.
La investigación se desarrolla en el Instituto de Ciencias Físicas (ICF) del estado central de Morelos con apoyo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y del gobierno de Guerrero (sur de México).
El aceite de coco, fruto abundante en zonas tropicales del país, separa el agua que daña los oleoductos del petróleo, indicó el científico.
Para evitar que el líquido se adhiera al metal, el compuesto se vierte en el flujo del petróleo con el fin de que rechace el agua, con lo cual los oleoductos quedan protegidos en su interior, añadió Ascencio.
"Le llamamos Inhibidor Coco-Guerrero. Es equivalente a la imidazolina (sustancia que se usa contra la corrosión) lo que sigue es saber cómo hacerlo en grande y a bajo costo", comentó.
El físico detalló que actualmente se trabajan con cocos criollos e híbridos, dos variedades abundantes en Guerrero, en particular con los frutos del poblado de Marquelia
Indicó que la última parte del trabajo consistirá en llevar a las comunidades de Guerrero la metodología y los equipos portátiles para desarrollar el proceso y obtener el aceite con valor agregado.
"Se trata de que todos ganen, de incentivarlos al crecimiento", afirmó.
En México existe una red formada por 13.000 kilómetros de oleoductos dedicados al transporte de crudo; unos 8.300 kilómetros para transportar hidrocarburos refinados como gasolina y diesel y otros 17.000 kilómetros para gas natural y gas LP.
EFE