Los investigadores del Pentágono trataban de entender este viernes las causas del fracaso de un vuelo de prueba de un avión hipersónico capaz de volar a 27.000 km/h, argumentando que este tipo de experimento forma parte de "un terreno prácticamente inexplorado".
Cerca de nueve minutos después de comenzar su vuelo el jueves, la Agencia para la Investigación Avanzada en Proyectos de Defensa (DARPA, por sus siglas en inglés) del Pentágono perdió contacto con la nave, diseñada para volar en las altas capas de la atmósfera terrestre a una velocidad que puede alcanzar hasta 22 veces la barrera del sonido.
"Las primeras indicaciones son que el avión se sumergió en el Pacífico, siguiendo el plan de vuelo programado", declaró DARPA en un comunicado.
Construido por Lockheed-Martin, este aparato sin piloto, bautizado Hypersonic Technology Vehicle 2 (HTV-2), está destinado a brindar al ejército, a largo plazo, una plataforma para alcanzar blancos en cualquier lugar del planeta con armas convencionales.
A diferencia de un misil, el avión hipersónico es maniobrable y sigue en consecuencia una trayectoria menos previsible. Su desarrollo responde a los proyectos militares estadounidenses de atacar objetivos en el otro extremo del planeta con armas convencionales en menos de una hora, un proyecto bautizado 'ataque global rápido'.