AVN.- El presidente de la Comisión Permanente de Petróleo y Energía de la Asamblea Nacional (AN), Luis Acuña, señaló que el presupuesto de la nación para el año 2012 tendrá una menor dependencia de los ingresos petroleros. “Nosotros deberíamos poder tener buena parte de nuestro Producto Interno Bruto (PIB), sobre la base de una economía diferente a la de la renta petrolera, ya que en un país socialista, la fuerza del trabajo es la que determina el crecimiento”, dijo.
Señaló que el aporte de los recursos provenientes de la industria petrolera (67 mil 813 millones de bolívares), sólo representa el 22,8% del monto total del presupuesto (Bs. 297 mil 836 millones), lo que garantiza que el funcionamiento del Estado se fundamente en el trabajo productivo y pueda hacer frente a la volatilidad de la cotización del crudo en los mercados internacionales.
“En eso es que se está trabajando, por eso se está formando y capacitando al pueblo, y se fortalece el crecimiento de las industrias y el campo, para que esta economía tribute a la vía de los impuestos y nutra el Plan de Desarrollo Nacional Simón Bolívar”, subrayó.
El diputado también recalcó que en este proyecto predominan las inversiones para la infraestructura y el impulso a los de programas sociales en las áreas de salud, educación, tecnología y agricultura.
Presupuesto prudente
Acuña declaró que el cálculo prudente del presupuesto 2012, sobre la venta de un barril de petróleo a 50 dólares, garantizará que ante una eventual caída del precio crudo, las inversiones y programas del Estado no se vean afectados.
“Una vez que el presupuesto se hace, eso tiene un conjunto de implicaciones en todo lo que tiene que ver con los situados constitucionales y las asignaciones a los estados, porque no es lo mismo que el precio del barril se mantenga por encima de 50 dólares, a que baje de este monto y el gobierno entre en déficit, y no cuente con los recursos para respaldar su presupuesto”, añadió.
Destacó que la tendencia conservadora que ha mantenido el Ejecutivo durante los últimos dos años, le ha permitido cumplir con los compromisos con la ciudadanía, y redistribuir los ingresos adicionales a un gasto social.
“Por ejemplo, el excedente petrolero y los recursos que pasan al Fondo de Desarrollo Nacional (Fonden), son empleados para la recuperación del área económica y el incremento de la inversión social, para financiar gran parte de los créditos adicionales que atienden a los sectores: alimentación, transporte, tecnología, medio ambiente e, incluso, el fortalecimiento del Sistema Eléctrico Nacional (SEN)”, indicó.
