El Alcalde Metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, le hizo llegar a a la
representación de la Organización de Estados Americanos en nuestro país
denuncias dirigidas a la Comisión Interamericana de DDHH para reclamar por el
secuestro del diputado de la AN Oscar Ronderos y otros problemas en su gestión.
Lea el documento
Señora Presidenta:
Me es
grato dirigirme a usted en ocasión de informarle, y por su digno intermedio a
otros miembros de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, sobre una
situación completamente anómala que actualmente se vive en la sede de la
Alcaldía Metropolitana de Caracas
El 23 de noviembre de 2008 fui electo,
con una amplia mayoría, Alcalde Metropolitano de la ciudad de Caracas. No
obstante ello y desconociendo la voluntad popular, fui despojado, casi
inmediatamente, de los recursos financieros correspondientes por ley a la
Alcaldía Metropolitana así como de la mayoría de mis competencias. Todas estas
irregularidades o fueron cometidas directamente por el gobierno nacional o
avaladas por él. Está actitud persecutoria, de hostigamiento, antidemocrática y
de irrespeto a la voluntad popular, se ha mantenido a lo largo de estos dos
últimos años.
Más recientemente, el lunes 19 de los corrientes, 20
trabajadores de la Alcaldía del área de recursos humanos, fueron privados de su
libertad por un grupo importante de manifestantes afectos al oficialismo que
irrumpieron en nuestra sede, al parecer incluso portando armas. Esta situación
se agravó el martes 20 en horas de la noche cuando el diputado a la Asamblea
Nacional, Oscar Ronderos, quien acudió, en su calidad de miembro de la comisión
parlamentaria designada para tratar de resolver el conflicto surgido con un
grupo de unos dos mil trabajadores reincorporados por el gobierno nacional a la
Alcaldía sin dotarla de los recursos financieros correspondientes para atender
sus reclamos salariales, fuera secuestrado y privado de su libertad hasta
momentos en que le escribo esta carta. En las actuales circunstancias la única
persona secuestrada es el diputado Oscar Ronderos, sin que las autoridades
competentes se hayan pronunciado sobre ello.
Como usted y sus colegas
podrán apreciar, mientras nuestro ciudadano presidente pregona la supuesta
democracia que vive Venezuela, el hecho real es que en nuestro país se vulneran,
de manera sistemática, los derechos fundamentales de nuestros ciudadanos y
autoridades legítimamente electos por voluntad popular, violentado de esta
manera lo que está consagrado en la Constitución Nacional de la República
Bolivariana de Venezuela.
Elevo a vuestra consideración esta grave
situación, consciente que ustedes sabrán prestarle toda la atención que ella se
merece y elevarán su voz de protesta frente a tales atropellos, en el marco de
la promoción y defensa de los derechos humanos en nuestros países y en respeto a
las propias decisiones de la Comisión.
Al agradecer a usted sus amable
atención, me reitero su atento servidor, cordialmente.