(dpa) - La Casa Real española obligó a Iñaki Urdangarín, esposo de la
infanta Cristina, que abandonara el instituto Nóos, por cuyas
actividades se ha visto salpicado por supuestos delitos de corrupción, informan hoy medios
españoles.
La Casa del Rey le pidió que se apartara y buscara otro empleo por
cuenta ajena, a ser posible fuera de España, cuando el asesor externo
de la monarquía supo que el Instituto Nóos, que el propio Urdangarín presidía,
se dedicaba actividades lucrativas, algo que vulneraba sus fines
fundacionales.
Tras aceptar el consejo y abandonar Nóos en junio de 2006, el duque de Palma,
junto a sus socios, inscribió en el registro una fundación para promover
la cultura y el deporte, pero no llegó a operar ya que el asesor de la
Casa del Rey comprobó que su funcionamiento tampoco estaba planteado de forma
adecuada.
Urdangarín, exjugador profesional de balonmano de 43 años, se ha visto así
envuelto en un escándalo de presuntos delitos de malversación de
caudales públicos, fraude, falsedad documental y prevaricación durante
el tiempo que estuvo al frente del Instituto Nóos, una fundación supuestamente
sin ánimo de lucro.
Se trata de la primera vez que un pariente directo del rey
Juan Carlos está a punto de ser imputado por la Justicia española, algo que los
medios del país dan por seguro que ocurrirá dentro de poco.
Tras el escándalo, el rey Juan Carlos decidió el pasado lunes apartarlo de los actos oficiales de la Casa Real al considerar
su comportamiento poco ejemplar. Además, anunció la publicación del desglose de
sus cuentas.
Desde primavera de 2009 los duques de Palma viven en
Washington, donde Urdangarín preside la Comisión de Asuntos Públicos de
Telefónica Latinoamérica, mientras que su esposa, la infanta Cristina, dirige el
área internacional de la Fundación “La Caixa”.
Fuentes: Dpa / Elmundo.es