Víctimas de Conviasa exigen al gobierno cumplir promesas de asistencia médica y psicológica
A pocos días de cumplirse dos años del accidente aéreo de Conviasa que dejó un saldo de 17 personas fallecidas y 34 heridas, dos víctimas de este siniestro se pronunciaron para exigirle al Gobierno Nacional que cumpla con garantizarles la atención médica y psicológica que necesitan.
Se trata de la joven Khristian Manueli Rivas de 28 años y Libia Reina quien perdió a sus dos hijas y a su esposo en la tragedia, ambas coincidieron en afirmar que desde hace un año Conviasa no les da respuestas a sus requerimientos.
Las dos damas estuvieron acompañadas por William Dugarte, asesor de un grupo de víctimas de este siniestro, quien explicó que aún la investigación oficial sobre las causas que lo originaron no ha culminado, sin embargo ya se conoce que el avión presentó diversas fallas y que se comprobaron irregularidades en sus mantenimientos.
Dugarte recordó que la grabadora de datos de vuelo del YV-1010 estaba dañada desde hacia un año antes de que el aparato se estrellara en Puerto Ordaz, sin que ninguna inspección del Instituto Nacional de Aviación Civil (INAC) o de Conviasa notara este incumplimiento de la normativa para que una aeronave pueda volar en Venezuela.
Aunado a ello, el ATR 42 fue sometido a un mantenimiento mayor pocos meses antes del accidente por una empresa estadounidense no certificada previamente por las autoridades venezolanas para realizar estos trabajos, la cual tampoco detectó el problema de la llamada “caja negra”.
Sumado a esto hubo otras irregularidades que podrían haber conducido a la avería de controles y a las lecturas erróneas que daba la computadora de vuelo a los tripulantes, quienes de acuerdo a la grabación de voz de la cabina realizaron un esfuerzo desesperado por llevar el avión hasta el aeropuerto, pero la conjunción de fallas que presentó el aparato los hizo estrellarse en un patio de Sidor.
Gaceta decorativa
Un año después del accidente fue publicada una Gaceta Oficial donde el Gobierno Nacional creaba una comisión que se encargaría de asistir a las víctimas y brindarles todo el apoyo, sin embargo la misma nunca se reunió ni llegó a funcionar.
La afirmación fue hecha por William Dugarte, quien lamentó que el Estado venezolano, propietario de la aerolínea involucrada en el siniestro no haya cumplido con la asistencia debida a las personas afectadas por la tragedia.
Khristian Manueli Rivas es un ejemplo de ello, ya que desde hace un año Conviasa no le cancela las facturas de los gastos médicos que ella ha pagado con sus recursos y debe recibir contra reembolso de la línea aérea.
Al momento la deuda de Conviasa con Rivas supera los 26 mil bolívares fuertes, y además requiere casi 40 mil más para someterse a una urgente intervención quirúrgicanecesaria en el tratamiento de las quemaduras que sufrió en el 80% de su cuerpo.
“Le he hecho llegar el presupuesto al gobernador Rangel Gómez, al presidente de Conviasa, a todo el mundo y nadie me responde. Yo necesito operarme porque sino no podré seguir recuperándome”, dijo.
La joven comentó que su vida ha cambiado a consecuencia de las lesiones sufridas, pues no puede exponerse al sol y tiene que usar ropa que le tape las quemaduras en el cuello, pese a lo cual sigue sin recibir el apoyo gubernamental que le fue ofrecido en los días cercanos al trágico evento.
“Le hago un llamado directo al presidente Hugo Chávez, usted ahorita se acaba de solidarizar con las víctimas de la tragedia de Amuay, pero le recuerdo que aquí en Puerto Ordaz hace dos años se cayó un avión y yo de eso resulté quemada. Ustedes no me ha cumplido con mi tratamiento médico, hoy en día me urge operarme y nadie me da respuestas, Conviasa no asume su responsabilidad conmigo ni con los demás afectados”, subrayó.
La misma situación enfrenta Libia Reina, quien aunque no iba en el avión perdió a su familia, “yo necesito ayuda psicológica, esto me ha afectado mucho porque cómo se vive tras perder de golpe a mis dos hijas y a mi esposo quien era el sostén de la familia”.
“Hoy estoy sola porque el hijo que me queda no siempre está conmigo, y he tenido que vender mis cosas para poder subsistir y pagarme los tratamientos, pues no tengo los 500 bolívares que cuesta cada consulta y Conviasa no ha cumplido con eso”.
“Solo nos cumplieron durante las dos primeras semanas, a mi me visitó una comisión de la Vicepresidencia de la República y me dieron un mensaje del vicepresidente Elías Jaua de que nos iban a atender, pero ya han pasado dos años y no tenemos ayuda, no hay justicia, yo perdí a mis dos hijas y a mi esposo y no hay justicia”, reveló.
Más irregularidades
Dugarte se refirió además a las irregularidades operacionales con las que funciona Conviasa recordando el accidente de un Boeing 737 de esta empresa en Ecuador durante 2008.
De la investigación sobre dicho siniestro aéreo las autoridades ecuatorianas publicaron un informe que está en Internet y que expone una serie de fallas que la aerolínea del gobierno venezolano no corrigió y contribuyeron a que se produjera el accidente de septiembre de 2010 en Puerto Ordaz.
Para concluir, el asesor de las víctimas también denunció que ningún presidente de Conviasa ha durado al menos un año en este cargo, ya que son removidos constantemente, de modo que es imposible mantener una política gerencial y de administración en esta aerolínea en tales condiciones, lo cual también ha afectado a las víctimas de la tragedia, pues a cada nueva gerencia deben explicarle otra vez sus casos.
Sin infraestructura
William Dugarte dio a conocer que Venezuela carece de la infraestructura y equipos suficientes para investigar siniestros aéreos, y la prueba de ello es que los restos del avión de Conviasa fueron llevados al Aeropuerto de Ciudad Guayana y arrojados en un terreno baldío adyacente a la pista.
“No es agradable para las víctimas pasar por allí y ver los restos de la aeronave, que además deberían estar resguardados para las investigaciones que dependen de la ayuda extranjera por estas carencias que tenemos en el país”, señaló.
Por: Carlos Jesús Gómez
