La isla de El Hierro, la más occidental y meridional de las Islas Canarias, en España, representa uno de esos casos singulares de la geografía del planeta Tierra, pues se desplaza hacia el este por la presión ejercida por el magma aunado a elevación de unos 11 centímetros del terreno en la Punta de Orchilla, el extremo de la isla más cercano a los terremotos.
De acuerdo con las mediciones del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan), la fuerza del magma infla y desplaza a la isla, donde ayer se registró un seísmo de 4.7 de magnitud en la escala de Richter, el mayor que se ha producido en la isla desde que comenzó la erupción volcánica submarina en 2011.
Para profundizar sobre este fenómeno de la naturaleza el portal web de El Comercio ha publicado un reportaje sobre el tema. Lea a continuación el texto publicado
El coordinador científico de Involcan, Nemesio Pérez, ha detallado en declaraciones a Efe que desde mediados de marzo la componente vertical ha registrado unos 11 centímetros de deformación en la Punta de Orchilla, el punto más al oeste de la isla, frente al cual, en el mar, se concentran la mayor parte de los seísmos de los últimos días.El científico aseguró que esto refleja el empuje que la actividad magnética bajo El Hierro, donde la dirección del Plan de Protección Civil por Riesgo Volcánico de Canarias (Pevolca) mantiene el semáforo amarillo de riesgo sísmico en parte de la isla y ha limitado la circulación en carreras que pueden estar expuestas a desprendimientos de rocas debido a las sacudidas.La cantidad de dióxido de carbono que emite a la atmósfera la isla de El Hierro se encuentra estos días, con unas 1.684 toneladas diarias, dos veces por encima de su rango normal. La emisión de dióxido de carbono a la atmósfera en El Hierro aumentó hasta 1.684 ± 72 toneladas diarias, según las mediciones del Involcan con fecha de 26 de marzo de 2013.Pérez explicó este viernes que este resultado es coherente con el actual repunte sísmico-deformacional asociado al proceso de reactivación magmática que experimenta El Hierro desde mediados de 2011. El coordinador científico de Involcan destacó que estos valores de dióxido de carbono no representan ningún peligro para la población, si bien ha agregado que estas mediciones van enfocadas a la vigilancia volcánica.
Con información de El Comercio