(EFE).- El presidente de Ecuador, Rafael Correa, reconoció hoy en España la labor de investigación de la petrolera Repsol, criticó la ley española sobre desahucios y deseó éxito al “flamante” presidente venezolano, Nicolás Maduro.
Ante unos 5.000 compatriotas, Correa hizo su habitual programa informativo “Enlace Ciudadano” de los sábados en la ciudad española de Valencia, donde informó sobre su gira europea de esta semana, que le llevó a Alemania, donde se entrevistó con la canciller Angela Merkel y al Vaticano donde fue recibido por el papa Francisco.
Correa congregó a miles de emigrantes ecuatorianos en actos en Milán (Italia), anoche en Madrid y hoy en Valencia, a los que agradeció su apoyo en las elecciones de febrero, en las que resultó reelegido.
El presidente de Ecuador aprovechó su programa de los sábados para enviar un mensaje de felicitación a Nicolás Maduro y decirle que “puede contar con sus hermanos ecuatorianos”, que no permitirán que se desestabilice el país.
“No tenemos por qué dudar” del triunfo electoral de Maduro, quien ganó con “una pequeña ventaja” sobre el líder opositor, Henrique Capriles, mientras que su predecesor, Hugo Chávez solía obtener una gran ventaja, y por eso, a su juicio, no se le cuestionó.
En el ámbito económico reiteró que el “gran desafío de la humanidad” es “liberarse de un sistema que aplasta a los seres humanos, todo en función del capital”, especialmente, el financiero, y que impera también en España, que, según dijo, “está sufriendo mucho”.En cualquier caso, Correa dijo estar convencido de que a Venezuela le esperan “días maravillosos” y advirtió “no permitiremos que la desestabilicen”.
Insistió en que la ley de hipotecas y desahucios española “es inmoral y criminal” porque sitúa el coste sobre los seres humanos, cuando, en su opinión, el riesgo “debe ser del capital”, porque los bancos “tuvieron comportamientos oportunistas” y prestaron “en exceso” y ahora, “no quieren asumir su responsabilidad”.
Correa también consideró que Europa puede generar crecimiento y empleo de forma rápida aplicando determinadas políticas porque “tiene sus capacidades intactas”, el problema, a su juicio, es que “todo está en función del capital financiero”.
Los problemas de Europa, dijo, son “fáciles de superar” porque, a su juicio, “no es una crisis real la que sufre”, sino financiera, y sus capacidades, ha reiterado, “están intactas”.
El presidente de Ecuador comenzó la jornada de hoy con una visita al Centro de Tecnología de Repsol en la localidad madrileña de Móstoles, acompañado del presidente del grupo petrolero, Antonio Brufau.
“Tengo que reconocer que Repsol es muy cuidadoso en Ecuador”, dijo Correa, quien consideró que el principal problema de la selva amazónica y la amenaza más importante es “el avance de la frontera agrícola y pecuaria” y las talas ilegales.
“Las zonas donde mejor está la selva es donde hay empresas responsables”,como la petrolera Repsol, declaró.
Explicó que durante su visita al centro de investigación de Repsol saludó a María Fernanda León, de Guayaquil (Ecuador), que trabaja allí y le pidió que aprenda y vuelva a su país para aplicar la experiencia adquirida.
Repsol trabaja en Ecuador desde 2001 y poco después de la llegada de Correa a la presidencia, en 2007, se vio obligada a renegociar todos sus contratos en el país -al igual que el resto de las grandes petroleras extranjeras- para equilibrar sus ganancias con las del Estado.
España es el país de Europa que cuenta con más ecuatorianos, unos 600.000, según comentó Correa y admitió que fueron los inmigrantes en el mundo (unos dos millones) los que con sus remesas sostuvieron la economía nacional tras la crisis financiera de 1998, una de las peores de la historia de su país.
El Enlace Ciudadano terminó con la canción “Un beso y una flor” del cantante español Nino Bravo, del que Correa se ha declarado fanático y de cuya muerte se acaban de cumplir 40 años.
