El porcentaje de vascos que afirman tener buena salud crece casi un 30%
La proporción de personas que perciben su salud como buena o muy buena ha aumentado cerca de un 30% durante la última década en Euskadi, según los datos de la Encuesta de Salud de la Comunidad Autónoma Vasca (ESCAV) de este año, presentados hoy por el departamento. El sondeo, realizado por primera vez en 1986, ofrece cada lustro desde 1992 una fotografía de la salud de los vascos.
La proporción de personas que perciben su salud como buena o muy buena ha aumentado tanto con respecto a 2002 (cerca de un 30% en ambos sexos) como a 2007 (5%), situándose en el 78% en las mujeres y el 82% en los hombres en 2013. Las mujeres declaran tener peor salud que los hombres.
La salud mental, expresada por la prevalencia de síntomas de ansiedad y depresión, ha empeorado en las mujeres desde 2002, pasando del 18% al 24% este año. En los hombres, la prevalencia apenas cambió de 2002 a 2007, pero sí ha aumentado desde entonces, alcanzando el 16% frente al 11% en 2007. La salud mental empeora al descender en la clase social.
El consumo de tabaco ha disminuido de forma muy considerable. En los hombres, ha pasado de un 30% en 2002 a un 28% en 2007 y un 24% en 2013. En las mujeres esta disminución ha sido menor, de un 20% en 2002 a un 19% en 2013. Las desigualdades socioeconómicas en el consumo de tabaco están aumentado, especialmente entre las mujeres jóvenes. La exposición pasiva al humo del tabaco en el trabajo y en establecimientos de hostelería ha disminuido de forma muy pronunciada.
Ha aumentado la proporción de personas que beben alcohol habitualmente. Si cerca del 59% de los hombres y el 30% de las mujeres eran bebedores habituales —tanto en 2002 como en 2007—, ahora lo son el 63% de los hombres y el 38% de mujeres. No obstante, la situación de estas es claramente mejor que la de los varones. En 2013, la prevalencia de consumo de alcohol de alto riesgo a largo plazo de tener problemas de salud es del 25% en los hombres y del 15% en las mujeres.
Ha aumentado la práctica de actividad física saludable en los varones, pero no ha habido progresos entre las féminas. Considerando sedentaria a aquella persona que no realiza ejercicio físico saludable, en 2007 el 32% de los hombres y el 35% de las mujeres eran sedentarios; en 2013 siguen siéndolo el 27% de los hombres y el 34% de las mujeres.
Tras el aumento producido entre 2002 y 2007, la prevalencia de obesidad en el conjunto de Euskadi se ha estabilizado (14% de los hombres y 12% de las mujeres). Las desigualdades socioeconómicas en la prevalencia de obesidad son muy relevantes en ambos sexos, y mayores en las mujeres.
Los parados tienen peor salud mental (ansiedad y depresión) que las personas empleadas. En concreto, un 92% más de los hombres y un 59% más de las mujeres desempleadas tiene peor salud mental que las personas empleadas. También registran un mayor consumo de tabaco que las empleadas, un 57% y un 25% más de los hombres y las mujeres, respectivamente.
Con todo, el consejero de Salud, Jon Darpón, ha advertido al presentar los datos en Vitoria de que la encuesta "no permite por sí misma sacar conclusiones" y relacionar la prevalencia de síntomas de ansiedad y depresión con la situación económica, ya que aunque parezca una relación directa muchas veces "no es fácil demostrarla".
Las mujeres soportan una carga de trabajo doméstico dos veces mayor que los hombres. No obstante, desde 2002 se mantiene el porcentaje de féminas que hace las labores del hogar siempre o casi siempre que se realizan (68%), habiendo subido en los varones (del 26% al 38%).
Cerca del 90% de la población se siente satisfecha o muy satisfecha con el sistema sanitario. No existen diferencias socioeconómicas en el grado de satisfacción con el sistema sanitario. Casi el 95% de las personas considera que el sistema sanitario cubre bien sus necesidades de atención.
El sondeo se realizó entre el último trimestre de 2012 y el primero de 2013, sobre una muestra de 5.300 hogares. Un total de 12.995 personas han respondido un cuestionario familiar y 8.036 personas de 15 y más años, a un cuestionario individual. ELPAIS