Más allá de las ganancias de algunos fabricantes de tecnología de consumo, que exhibe el poder de atracción en la sociedad, entre las desorbitadas cifras se puede leer entre líneas tendencias y luchas particulares. Apple y Samsung son las empresas que más teléfonos móviles inteligentes venden y pugnan cada año por encabezar la lista.
Hasta hace tres años, Nokia había sido durante 14 largos años el fabricante que más teléfonos móviles colocaba en las tiendas. Pero su empecinamiento en mantener su propio sistema operativo y, luego, su gran apuesta por un Windows Phone aún en pañales provocó quecediera el testigo a Samsung como el fabricante con mayores ventas.
La firma surcoreana ha mantenido un meteórico ascenso en los últimos cinco años, gracias a sus terminales de gama alta y al apoyo en el territorio del gama media. Tras la tibia acogida de su último buque insignia, el Galaxy S5, Samsung está cerca de perder la corona que le acredita líder mundial en ventas de teléfonos móviles inteligentes en detrimento de Apple, que ha sumado el mayor beneficio de la historia de una empresa gracias al increíble comportamiento de sus últimos modelos iPhone 6 y iPhone 6 Plus.
Así, los números ofrecidos por ambas empresas constatan el alcance de sus productos. Samsung ha vendido entre 71 y 76 millones de teléfonos móviles en el último trimestre, mientras que Apple ha colocado unos 74 millones de sus iPhones, sin desvelar el desglose total de sus versiones más recientes. Los analistas no aciertan a coincidir, ya que desde Strategy Analytics apuntan a un empate entre ambas firmas, desde Counterpoint Research rebajan hasta 73.8 millones de unidades vendidas en la casa surcoreana, por lo que Apple se erigiría como líder en este sector.
El gigante surcoreano reconoció que las ganancias por teléfonos inteligentes y otros dispositivos móviles cayeron un 64% en el último trimestre del año, lo que contribuyó a su primera caída anual en tres años. Lo cierto es que este es el quinto trimestre consecutivo de declives en la división de móviles, y ya se plantea realizar cambios importantes a lo largo del presente año.
Los analistas consultados por la agencia Reuters confirman que Samsung está bajo una gran presión de cara a conservar su cuota de mercado, cuya suerte dependerán del próximo modelo de «smartphone», el Galaxy S6, que llegará en marzo. De cara a revolucionar el sector y volver a generar interés entre los consumidores, la firma surcoreana apostará por rediseñar totalmente su producto estrella con nuevos materiales y un software mejorado.
Tras ellos queda patente el incremento de los productores chinos comoHuawei, Lenovo y Xiaomi, mientras que otras firmas como Sony se cuestiona se abandonar la producción de móviles y recortar puestos de trabajo en sus fábricas por el escaso impacto de sus nuevos dispositivos.ABC