El Secretario General de Naciones Unidas ha felicitado al gobierno de Mali y los miembros de una coalición de grupos armados rebeldes por sellar un acuerdo de paz en Bamako y lo calificó como un importante primer paso para devolver la estabilidad y seguridad al norte del país.
Según un comunicado emitido por el portavoz de la ONU, Ban Ki-moon cree firmemente que el acuerdo constituye una "fuerte base sobre la que construir una paz justa y duradera en Mali" y urgió a todas las partes a continuar el diálogo para "garantizar que todos firmen el acuerdo lo antes posible".
Además, Ban Ki-moon recordó a todas las partes que el alto el fuego del 23 de mayo de 2014 sigue siendo vigente y las urgió a que sigan cumpliendo sus obligaciones al respecto.
A pesar de los avances sobre el terreno, la situación en Mali lleva mucho tiempo siendo muy complicada. El gobierno del país lleva años tratando de restaurar la estabilidad e iniciar la reconstrucción del país después de una época turbulenta que arrancó en 2012, que incluyó un golpe de Estado militar, un enfrentamiento violento entre el gobierno y los rebeldes Tuareg y la ocupación del norte de su territorio por islamistas radicales.