Una empresa especializada en ciberseguridad ha creado un producto basado en imanes y destinado a sustituir los métodos caseros para tapar la cámara web. De esta manera, se evita que el usuario sea grabado, sin saberlo, a través de internet.
La compañía Webcam Security System creó un producto físico como alternativa al típico adhesivo que se coloca sobre las cámaras web, y que deja pegamento sobre el lente, dañándolo. Este aparato funciona gracias a una serie de imanes que, con una llave también imantada, permiten abrir la trampilla de la cámara solo cuando se usa, explica Miguel Ángel Garcerá, gerente de la empresa.
El experto ve en la cámara web un "ojo indiscreto" al que un hacker puede acceder de manera remota y grabar el tiempo que quiera.
Además, indica Garcerá, indica que los usuarios utilicen poco la cámara de la computadora, pero advierte de que el riesgo de que accedan a ella existe de la misma manera y espera que las personas entiendan que deben mantener dicho dispositivo resguardado, y solo abrirlo cuando se usará.
Destaca, por otro lado, que las personas desconocen los riesgos de tener la cámara webdescubierta y explica que esto se debe a la falta de información sobre el tema.
"Tenemos la sensación de que a nosotros no nos van a grabar, pero esto es muy aleatorio", advierte. "Lo que hacen con las grabaciones es venderlas a cualquier red; al fin y al cabo esto es un negocio, y no podríamos saber que esta grabación esta subida a internet".
EFE
