Si tienes predisposición genética a las estrías (por ejemplo, si tu madre las tuvo o tiene) no debes alarmarte, sino hacer lo posible para que no aparezcan con tanta fuerza.
El huevo es una gran fuente de proteínas, tanto cuando lo comemos como si lo usamos de manera externa. Es recomendable para que el cabello quede brillante y para quitar estrías cuando recién se han formado, solo tienes que batir un huevo y pasarlo por el área afectada una vez al día.
Al principio las estrías son de color rojo intenso pero, con el paso del tiempo, el tono va aclarando. Si no las cuidas de los rayos UV será más difícil que queden de un color apagado o menos llamativo.
La radiación solar debilita la piel y empeora el aspecto que tienen. Por lo tanto, si vas a la playa, no dudes en aplicar una crema solar con suficiente protección. Después del sol puedes usar lociones hidratantes que contengan aloe vera.
No fumes
Si bien es cierto que las mujeres embarazadas no deben fumar, este consejo también se aplica a aquellas que tienen el mal hábito fuera de las gestaciones. El humo del cigarrillo le hace mucho daño a la piel.
Los compuestos que ingresan al organismo lo dañan por dentro. Si estás en contacto con alguien que fuma en casa o el trabajo también puede hacer estragos en tu piel.
Haz ejercicio
El deporte te ayuda a que la piel esté más firme y sana. Eliminarás toxinas, controlarás tu peso y evitarás que la dermis se estire.
Prueba a hacer un ejercicio aeróbico 2 ó 3 veces a la semana. No es aconsejable elegir un ejercicio de musculación porque es contraproducente para tu problema de estrías: estira la piel y rompe las fibras.
Fuente: www.mejorconsalud.com