El documento garantiza que el Estado portugués mantendrá el 50 % del capital de TAP, frente al 34 % que preveía el acuerdo firmado con el Ejecutivo conservador de Pedro Passos Coelho, y que la gestión de la compañía quedará a cargo del consorcio Gateway.
El actual primer ministro luso, el socialista António Costa, señaló tras la firma del acuerdo que "el conflicto está resuelto" y que fue encontrada una solución "dentro de la ley". EFE