Un equipo liderado por Andrés Ruiz-Linares y Kaustubh
Adhikari , del University College London (UCL), descubrió el primer
gen, IRF4, asociado al encanecimiento, confirmando que este rasgo tiene
un componente genético y no se debe solo al medio ambiente. El hallazgo,
que se publica en Nature Communications, podría arrojar nueva luz sobre
los procesos de envejecimiento.
Ruiz-Linares comenta que el
envejecimiento comprende una serie de cambios biológicos que afectan
nuestra apariencia externa, como por ejemplo la piel y el cabello, así
como alteraciones internas tal como aumento en el riesgo a muchas
enfermedades, pérdida de memoria, entre otros.
Este proceso no es una consecuencia exclusiva de la edad, añade, ya que también está influenciado por factores externos como el medioambiente, la dieta y el estrés, entre otros. Dos de los rasgos de cabello que analizamos en este estudio, encanecimiento y calvicie, están relacionados con el envejecimiento, señala.
Pese
ha este hallazgo todavía no se sabe exactamente cuál es el factor que
conduce a la aparición de canas a una determinada edad.
Los
investigadores analizaron una muestra de más de 6,000 personas con
diferente composición genética ancestral a lo largo de Latinoamérica
para identificar genes asociados con encanecimiento, color, densidad y
forma del cabello. Ya se conocen varios genes implicados en la calvicie y
el color del cabello, pero ésta es la primera vez que se identifica un
gen asociado al encanecimiento en humanos, dice Ruiz-Linares.
Dichos
hallazgos asimismo podrían ayudar a desarrollar tratamientos contra la
calvicie. Según Ruiz-Linares, eso es algo que esperamos a largo plazo a
medida que podamos estudiar estos genes y sus características con mayor
detalle.
ABC