La Anorexia es una enfermedad mental que consiste en una pérdida de peso derivada de un intenso temor a la obesidad
La Bulimia es un trastorno mental que se caracteriza por episodios repetidos de ingesta excesiva de alimentos en un corto espacio de tiempo y una preocupación exagerada por el control del peso
Esta preocupación lleva a la persona afectada a adoptar conductas inadecuadas y peligrosas para su salud
Principal arma de los padres para contrarrestar esta enfermedad es la observación de sus hijos. Es importante estar atentos a los cambios bruscos de sus conductas.
Los casos de anorexia y bulimia se han incrementado en nuestro país y no solamente las mujeres son las afectadas por este mal sino también los hombres e incluso peor, los niños quienes ahora son atacados por esta penosa enfermedad.
Los menores que entran en la etapa de la pubertad ya empiezan a preocuparse por su apariencia tomando como modelos los patrones difundidos en los medios de comunicación y los que se repiten en los hogares.
La sicóloga, Katia González, integrante de la campaña “Quiérete”, que tiene como eje principal la prevención de la bulimia y la anorexia, indicó en RPP Noticias que el principal arma de los padres para contrarrestar esta enfermedad es la observación de sus hijos.
"Estamos tan metidos en la rutina diaria que nos olvidamos de pasar tiempo con nuestros hijos, observar qué hacen y qué dejan de hacer", indicó.
González señaló que es importante estar atentos a los cambios de actitudes en los comportamientos de los hijos, especialmente, los de forma drástica."Hay que preguntarles qué está pasando".
"Tenemos que estar atentos especialmente en la pubertad de los niños ya que en esta etapa la inseguridad es algo muy común, lo que facilita la caída en conductas riesgosas", precisó.
Manifestó que, los niños experimentan cambios en su conducta con la finalidad de encajar en los modelos que la sociedad considera como "valorables" lo que podría resultar peligroso al tener comportamientos de riesgo.
"Nadie quiere tener un rasgo que la sociedad ha categorizado como de menos valor. Es bien difícil que nuestras adolescentes se acepten por lo que son ", contó.
Finalmente, recomendó estar más atentos a lo que hacen nuestros niños y adolescentes y, sobre todo, recordarles que son únicos.
"Debemos dejar de compararlos con sus hermanos, amigos o con nosotros cuando fuimos niños y recordarles que son importantes, precisamente porque son únicos", concluyó.