AFP) – Al menos 2.000 tiburones han muerto en el Pacífico colombiano, en zona protegida y patrimonio de la humanidad, por acción de pescadores costarricenses que luego de cortarles sus aletas los devolvieron al mar, denunció este viernes la consejera presidencial, Sandra Bessudo.
“Me ha llegado un reporte, realmente alucinante, de unos buzos que llegaron desde Rusia para observar las grandes concentraciones de tiburones en (la isla de) Malpelo, y se han encontrado con gran cantidad de pesqueros entrando a la zona de manera ilegal”, dijo Bessudo a periodistas.
Según la funcionaria, encargada de los temas ambientales, “los buzos que querían ver los tiburones con vida, se encontraron con un desastre y es que 10 barcos de bandera costarricense ingresaron ilegalmente, no solamente a aguas colombianas, sino también al santuario de Malpelo a realizar sus faenas de pesca”.
“Esto es un desastre. Los buzos encontraron kilómetros y kilómetros de líneas de pesca enredadas en el fondo, y obviamente el daño ambiental es total”, advirtió Bessudo.
La Armada (Marina de Guerra) colombiana tenía disponibles para la vigilancia de la zona dos buques, pero según la funcionaria “infortunadamente sufrieron unas averías y están siendo reparados en puerto”, lo que fue aprovechado “para que estos barcos de bandera costarricense entraran ilegalmente”.
“Tenemos los nombres de tres de las 10 embarcaciones y estamos iniciando los trámites a través de Cancillería para denunciar el hecho ante las autoridades de Costa Rica”, agregó.
El almirante Hernando Wills, comandante de la Armada en la región, dijo que a comienzos de la semana una embarcación estuvo patrullando el área “sin encontrar novedad”.
Sin embargo, anotó, tras recibir el reporte de la consejera presidencial, el personal destacado en Malpelo “no pudo obtener confirmación de la situación”, y ello sólo será posible la próxima semana cuando sea enviada al lugar otra nave de la Armada.
Las aletas de tiburón son el insumo para una costosa sopa que se vende especialmente en los mercados asiáticos, y el costo de un kilo de ese producto oscila entre los 20 y los 40 dólares en Colombia o Panamá.