EFE-El presidente paraguayo, Fernando Lugo, promulgó este lunes el estado de excepción en los norteños departamentos de Concepción y San Pedro por 60 días para combatir a un grupo guerrillero autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), informó el Gobierno.
"El estado de excepción empezará a regir desde este lunes", anunció el ministro del Interior, Carlos Filizzola, que dijo haber desplazado un millar de policías a la zona.
La norma permitirá la intervención militar en la región para cooperar en el combate al EPP.
A dicho grupo se atribuye la reciente ejecución, en setiembre, de dos agentes de una subcomisaría en Horqueta (550 km al norte de Asunción) y sus incursiones mantienen en zozobra a la población.
El Gobierno ya había decretado el estado de excepción entre abril y mayo de 2010 en la misma región, con resultados infructuosos.
En esa ocasión no se produjo ni una sola detención de los señalados como líderes de la organización clandestina, lo cual hace desconfiar de su existencia a referentes de la oposición.
En todo caso, éstos acusan al gobierno de protegerlos teniendo en cuenta que algunos de los identificados como líderes del grupo, que se autodenomina marxista, fueron alumnos del seminario para sacerdotes que había en la diócesis de San Pedro en los noventa, donde era obispo el hoy presidente Lugo.
La región de Concepción y San Pedro, la más pobre del país y de escaso control por parte del Estado, es considerada por expertos antidrogas como la principal productora de marihuana de Paraguay, así como lugar de tránsito hacia Brasil y Europa de la cocaína procedente de Bolivia y Colombia.
"El estado de excepción empezará a regir desde este lunes", anunció el ministro del Interior, Carlos Filizzola, que dijo haber desplazado un millar de policías a la zona.
La norma permitirá la intervención militar en la región para cooperar en el combate al EPP.
A dicho grupo se atribuye la reciente ejecución, en setiembre, de dos agentes de una subcomisaría en Horqueta (550 km al norte de Asunción) y sus incursiones mantienen en zozobra a la población.
El Gobierno ya había decretado el estado de excepción entre abril y mayo de 2010 en la misma región, con resultados infructuosos.
En esa ocasión no se produjo ni una sola detención de los señalados como líderes de la organización clandestina, lo cual hace desconfiar de su existencia a referentes de la oposición.
En todo caso, éstos acusan al gobierno de protegerlos teniendo en cuenta que algunos de los identificados como líderes del grupo, que se autodenomina marxista, fueron alumnos del seminario para sacerdotes que había en la diócesis de San Pedro en los noventa, donde era obispo el hoy presidente Lugo.
La región de Concepción y San Pedro, la más pobre del país y de escaso control por parte del Estado, es considerada por expertos antidrogas como la principal productora de marihuana de Paraguay, así como lugar de tránsito hacia Brasil y Europa de la cocaína procedente de Bolivia y Colombia.