(AFP) – El balance de víctimas de la represión contra la contestación en Siria es de al menos 4.000 civiles muertos, declaró el jueves la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, durante una conferencia de prensa en Ginebra.“En lo que respecta a Siria, nosotros estimamos el balance en por lo menos 4.000 muertos, pero según las informaciones que recibimos, es mucho más”, declaró Pillay, en vísperas de una sesión especial del Oacdh sobre la situación de los derechos humanos en Siria, a la luz del reciente informe de una comisión investigadora.
El anterior balance de la ONU sobre la represión en Siria, del 8 de noviembre, señalaba unos 3.500 muertos.
Un informe abrumador para Siria fue publicado el lunes por la comisión internacional investigadora, bajo mandato del Consejo. Dicho informe llegó a la conclusión de que las autoridades sirias habían cometido crímenes contra la humanidad en su represión de las manifestaciones de los opositores contra el régimen desde marzo.
La solicitud de una sesión especial firmada por 68 países, miembros y no miembros del consejo, fue presentada por Polonia en nombre de la Unión Europea.
