Al menos siete personas murieron en un sismo de 6,7 grados de magnitud en la escala Richter ocurrido cerca de la isla filipina de Negros, en la región central del archipiélago, indicaron fuentes oficiales.
"Por el momento hemos podido confirmar siete víctimas mortales", afirmó a la cadena de televisión GMA News el director del Centro Nacional de Desastres, Benito Ramos.
Ramos explicó a Efe que una de las víctimas es una niña de 9 años que murió aplastada por un muro derruido por el fuerte temblor en la aldea de Tayasan, en la provincia de Negros Oriental.
Según el informe de este organismo, otro niño de 11 años falleció en la localidad de Jimalalud al derrumbarse el muro de una capilla, mientras que otras cuatro personas sin identificar perecieron en la localidad de Guihulngan y otra en Tayasan.
El director del Centro de Prevención de Desastres señaló que el temblor ha provocado grietas y roturas de cristales en centros comerciales y algunos edificios públicos de la provincia de Negros Occidental y en las ciudades de Cebú e Iloilo.
El Servicio de Sismología y Vulcanología (Phivolcs) canceló la alerta de tsunami de nivel 2 sobre 5 que emitió en las costas de la isla de Negros y de la cercana isla de Cebú.
El Gobierno ha ordenado a los pescadores de la zona que no salgan a faenar y pidió a la población en zonas de riesgo que abandone sus casas, aunque no está prevista una evacuación forzosa.
El temblor ocurrió a las 11.49 hora local (3.49 GMT) y su epicentro se localizó a 19 kilómetros de profundidad y 70 kilómetros al norte de Dumaguete, en Negros, según los datos del Servicio Geológico de Estados Unidos, que mide la actividad sísmica en todo el mundo.
Según Phivolcs, la profundidad fue de apenas 10 kilómetros y la intensidad de 6,9 grados.
El sismo fue seguido de dos réplicas de 5,6 y 4,8 grados de magnitud.
Filipinas se asienta sobre el llamado "Anillo de Fuego del Pacífico", una zona de gran actividad sísmica y volcánica que es sacudida por unos 7.000 temblores al año, la mayoría moderados.
EFE