Cada cultura tiene tradiciones y ritos que quizás no son entendidos por el resto de la sociedades, pero que son respetados porquerepresentan la idiosincracia de los pueblos.
Pero, ¿qué pasa cuando estas resultan escalofriantes y hasta peligrosas?. Este es el caso de un ritual que se realiza anualmente la localidad Karnataka al sur de la India, donde un grupo de sacerdotes arroja a pequeños niños desde un balcón con una altura de 30 metros para augurarles salud y buena fortuna.
A luz de estas imágenes, algunos grupos protectores de los derechos de los niños han catalogado esta tradición como “barbárica” y le exigen al Gobierno de la India que dicte una medida de prohibición.
Se estima que la práctica se ha realizado por siglos en varias partes de ese país e involucra tanto a hindúes como a musulmanes.
Un video tomado en el año 2009 muestra a varios sacerdotes con túnicas justo en el momento en que sacuden a los pequeños y los arrojan mientras una gran multitud espera abajo para sujetarlos con mantas, al tiempo que aplauden cuando han llegado sanos y salvos
Algunos protestantes de la localidad lograron que la medida fuese prohibida en el año 2011, sin embargo, parece haber vuelto al templo de Digambeshawara en Nagrala la semana pasada.
Con información de Daily Mail