La policía secreta china detuvo al activista de derechos humanos Hu Jia, anunció el domingo la esposa de este amigo del abogado Chen Guangcheng, quien de haberse refugiado en la embajada de Estados Unidos en China, como se cree, puede desatar una crisis diplomática bilateral.
El sábado por la noche, Zeng Jinyan informó en su cuenta Twitter de la detención de Hu Jia para ser interrogado en una comisaría del este de Pekín. Ese mismo día se había difundido una fotografía en la que Hu, sonriente, estaba en compañía de Chen, con sus inconfundibles gafas oscuras.
Horas antes de que fuera arrestado en este país comunista, Hu había declarado a la AFP que creía que Chen Guangcheng se hallaba en la embajada estadounidense en Pekín.
"Gente de la comisaría vino a buscar medicamentos antivirales. Su detención provisional ha sido prolongada hasta 24 horas. Pregunté dónde iba a dormir, me contestaron: 'en una silla'", según un tweet de la señora Zeng, con la que no se ha podido contactar por teléfono este domingo.
La esposa de Hu Jia no aclaró por qué su marido necesitaba medicamentos. Dijo, no obstante, que a ella también la habían convocado las autoridades.
El domingo por la mañana, "la seguridad del Estado de Tongzhu (en el este de la capital china) me llamó exigiendo verme hoy para hablar conmigo. Estoy harta de este tipo de conversaciones sin fin, acompañadas de comida y de alcohol, ¡basta ya!", según otro mensaje de Zeng, quien añadió que no sabía dónde dejar a su hijo.
Poco antes de las cinco de la tarde, hora local, aseguró que "Hu Jia seguía en la comisaría de Zhongcang (en el distrito de Tongzhu). De hecho está siendo interrogado por la Seguridad del Estado", la policía secreta china, precisó su mujer.
Célebre por su lucha en favor de los derechos humanos, las víctimas del sida o el medio ambiente, Hu Jia fue liberado en junio de 2011 después de haber purgado tres años de cárcel por "intento de subversión del poder".
Por su parte, Chen Guangcheng, apodado "el abogado descalzo", lucha contra las prácticas abusivas de esterilización de miles de mujeres y de abortos avanzados y forzados.
Nicolas Bequelin, de la organización Human Rights Watch, estimó en su cuenta Twitter que hay pocas probabilidades de que se libere a Hu Jia hasta que se resuelva el caso de Chen Guangcheng, quien, en un vídeo, se quejó al primer ministro de los malos tratos que afirma haber sufrido.
Chen se escapó en circunstancias aún confusas. Si se ha refugiado realmente en la embajada estadounidense, el disidente pondría en un aprieto tanto a Pekín como a Washington ante la próxima visita, el 3 y 4 de mayo, a la capital china de la secretaria de Estado estadounidense Hillary Clinton y del secretario del Tesoro Timothy Geithner, para mantener un "diálogo estratégico y económico" entre los dos países.
Además este caso puede sacar a relucir las divisiones internas en el régimen chino, a unos meses de un congreso del Partido Comunista que se espera aúpe a una nueva generación de dirigentes al poder.
AFP