Los miembros del grupo del terrorista Sendero Luminoso (SL) fueron considerados por el banco de inversión BCP Securities como una banda de “matones sin ideología política” que no han impedido el desarrollo del país en los últimos años.
Según el reciente informe de la institución financiera, los medios periodísticos del Perú difunden información sobre las acciones subversivas de SL, pero sin el impacto de terror que desplegaron en las décadas del 80 y 90.
“Aunque los medios de comunicación se refiere a ellos como el renacimiento de Sendero Luminoso, los subversivos maoístas (…) son más una banda que aprovisionan de combustible al narcotráfico, de matones sin ideología política”, precisa el documento.
El informe refiere que ese accionar es muy similar a los cárteles de la droga que “están devastando al campo mexicano” y que han generado una gran ola de violencia urbana en algunos estados de esa nación.
Sin embargo, BCP Securities destaca que pese al despliegue de los rezagos terroristas en el valle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE), el nivel de crecimiento económico en el país continúa ascendente, tal como lo revela la descripción de sus ciudades, especialmente Lima.
“El aroma de los perfumes de la prosperidad se perciben en las calles de Lima, los coches alemanes de lujo se deslizan a través de la nueva vías pavimentadas, chefs famosos son el pan de la ciudad, y brillantes edificios de apartamentos de vidrio brotan”, refiere.
Si bien resalta el desarrollo alcanzado por Perú, con un promedio de crecimiento anual de 6 por ciento, el informe también detalla el descontento social que se presenta en algunas zonas rurales del país.
Como ejemplo de ello, señala la utilización que SL hace de los campesinos en el VRAE, zona selvática que se encuentra en la ladera oriental de la Cordillera de los Andes, considerada una de las mayores regiones productoras de coca en Perú.
Otro de los problemas sociales lo ubica en Cajamarca, donde “una minería a cielo abierto”, representada por el proyecto Conga, ha generado preocupación en la población porque teme la interrupción del suministro de agua proveniente de lagunas locales.
Para ello, el Gobierno peruano realizó un peritaje con expertos internacionales sobre el estudio de impacto ambiental de Conga, y formó una comisión de viceministros para que expliquen a la población los alcances del peritaje.
ANDINA