El sargento fue uno de las personas grabadas por el FBI en un intento de comprar el silencio de Antonini por dos millones de dólares. El militar fue grabado durante un encuentro con el empresario venezolano en una cafetería Starbucks en Plantation, una localidad cercana a Miami.
El 4 de agosto de 2007, el empresario Wilson viajaba en un vuelo oficial con directivos de Petróleos de Venezuela (Pdvsa), el titular del Occovi, Claudio Uberti y su secretaria Victoria Bereziuk. Según la Justicia norteamericana, esa y otras valijas estaban destinadas a la campaña presidencial de la entonces candidata Cristina Fernández de Kirchner