El papa Benedicto XVI anunció este lunes que deja el pontificado el próximo 28 de febrero por su "edad avanzada " y por sentir que le falta el vigor para seguir en el cargo.
El Papa, de 85 años, hizo el anuncio durante un consistorio que celebró en el Vaticano para fijar las fechas en las que serán proclamados nuevos santos.
A los cardenales presentes les explicó en latín que les había convocado a este consistorio: "no solo para las tres causas de canonización, sino también para comunicaros una decisión de gran importancia para la vida de la Iglesia".
El Papa afirmó que "después de haber examinado ante Dios reiteradamente mi conciencia, he llegado a la certeza de que, por la edad avanzada, ya no tengo fuerzas para ejercer adecuadamente el ministerio petrino".
Benedicto XVI, de 85 años, agregó que es muy consciente de que este ministerio, por su naturaleza espiritual, "debe ser llevado a cabo no únicamente con obras y palabras, sino también y en no menor grado sufriendo y rezando".
El Obispo de Roma consideró que en el mundo de hoy, sujeto a rápidas transformaciones y sacudido por cuestiones de gran relieve para la vida de la fe, (...) es necesario también el vigor tanto del cuerpo como del espíritu.
Y entonces destacó que en los últimos meses este vigor ha disminuido "de tal forma que he de reconocer mi incapacidad para ejercer bien el ministerio que me fue encomendado".
Ante ello anunció que "muy consciente de la seriedad de este acto y con plena libertad", renunciaba al ministerio de Obispo de Roma, Sucesor de San Pedro.
RENUNCIA POR SALUD
La renuncia al pontificado del papa Benedicto XVI anunciada este lunes se debe a motivos de salud, según declaró su hermano Georg Ratzinger desde Ratisbona, al sur de Alemania.
"La edad oprime", dijo Georg Ratiznger, de 89 años de edad, en declaraciones recogidas por la agencia alemana de noticias DPA, en las que comentó que el médico del sumo pontífice ha aconsejado al papa que no haga mas viajes transatlánticos.
REACCIONES
El portavoz del gobierno alemán, Steffen Seibert, aseguró que el papa Benedicto XVI ha dado un sello propio a sus ocho años de pontificado, que se deben "agradecer" y agregó que su decisión de abandonar el cargo es algo que sin duda conmueve a los católicos y los cristianos.
"Durante sus ocho años de pontificado, Benedicto XVI le dio a la iglesia un sello propio. Como cristiano y como católico su decisión me conmueve. Sin duda hay que agradecerle los años en los que fue guía de la iglesia", dijo Seibert.
El pontífice indicó a los cardenales la necesidad de celebrar el 28 de febrero un cónclave para elegir a sus sucesor.
El papa fue elegido el 19 de abril de 2005.
EFE