El manto de hielo de la Antártida occidental pierde unos 150 kilómetros cúbicos al año, es decir, un 15 por ciento más de lo que se estimaba hasta ahora, según informó hoy la Agencia Espacial Europea (ESA) a partir de datos obtenidos con el satélite CryoSat.
El aumento se debe, en parte, al incremento de las pérdidas de hielo en los glaciares, pero también a la capacidad de observación del CryoSat en áreas que hasta ahora escapaban al análisis de los científicos, indicó la ESA en un comunicado.
"El deshielo de los mantos de la Antártida y Groenlandia es el mayor contribuyente al aumento global de los niveles de agua marina", agregó la Agencia Espacial Europea.
En anteriores estimaciones, los científicos habían concluido que el nivel del mar aumentó a un ritmo de 0,28 milímetros al año entre 2005 y 2010, año en el que se puso en órbita el CryoSat.
Pero los datos aportados por el radar equipado en el Cryosat, que permiten "ver a través de las nubes y en la oscuridad", sugieren que la pérdida de hielo es un 15 por ciento superior, agregó la ESA.