En la previa del comienzo del Mundial esta noche fue deportado el primer barrabrava argentino cuando llegaba a Brasil por el aeropuerto Guarulhos de Sao Paulo.
Daniel "Rana" Atardo, de 45 años, identificado como barrabrava del club Rosario Central y delegado gremial, fue enviado de vuelta a Argentina cuando las autoridades brasileñas detectaron que integraba una nómina de 2.100 argentinos con antecedentes por violencia en los estadios.
En esta nómina, que entregó el Gobierno argentino a su par brasileño, figuraba este barrabrava que pretendía viajar a Brasil junto con su esposa.
Débora Hambo, abogada de este grupo de barrabravas, afirmó que pedirá un recurso de amparo contra esta decisión y que lo repetirá cada vez que se le niegue el ingreso a un "hincha legítimo" argentino a suelo brasileño.
Asimismo, las autoridades brasileñas reforzaron desde anoche todas fronteras argentinas a la espera de la llegada de más barrabravas por la vía terrestre para el primer partido que la selección albiceleste jugará el domingo ante
Bosnia-Herzegovina en el estadio Maracaná de Río de Janeiro.
EFE