( Nota de prensa).- Con el firme compromiso de seguir impulsando la producción nacional y enfrentar la guerra económica, Toyota de Venezuela sede Cumaná,reanudó operaciones este lunes, al tiempo que se realizó la instalación de la mesa de negociaciones entre el Gobierno Nacional y fuerza laboral obrera, en aras de canalizar las demandas de este sector.
Desde tempranas horas de la mañana, los trabajadores asistieron a la planta de la empresa japonesa local ubicada en Cumaná, con la intención de continuar con las labores de producción del sector automotriz venezolano.
Asimismo, y en paralelo, desde el Hotel Venetur Cumanagoto de la ciudad cumanés, representantes de los trabajadores de Toyota de Venezuela, gobernación del estado Sucre, Ministerio del Poder Popular para el Trabajo, y Vicepresidencia Económica y Financiera, instalaron la mesa de negociación que permitirá lograr los acuerdos necesarios para continuar con la producción y atender las peticiones del sector laboral.
Este lunes, también arrancó el cronograma de trabajo acordado con los trabajadores, que permitirá dar respuesta a las peticiones, según lo contemplado en la Ley Orgánica del Trabajo, los Trabajadores y las Trabajadoras (LOTTT) y demás normativas vigentes del marco legal de la República Bolivariana de Venezuela.
Andrés Izarra, representante de la Vicepresidencia Económica y Financiera para la región oriente, reiteró el compromiso del Gobierno del presidente, Nicolás Maduro Moros, por garantizar las condiciones laborales de los trabajadores así como maximizar los niveles de producción de vehículos para todo el pueblo venezolano.
Mientras tanto, Luis Acuña, gobernador del estado Sucre, enfatizó la disposición del gobierno regional, así como los diferentes niveles del Gobierno Bolivariano por seguir trabajando en pro del fortalecimiento del aparato productivo nacional.
Los representantes de los trabajadores, ratificaron por su parte, la convicción de contribuir a la consolidación del sector productivo venezolano y enfrentar los intentos de la derecha y otros sectores, por desestabilizar la industria automotriz de Venezuela.
Es importante mencionar que desde comienzos de septiembre, la fábrica estaba paralizada por una protesta laboral debido a la supuesta violación del contrato colectivo en lo referente a aumento salarial y la asignación del auto anual a cada empleado. Así lo indicó el entonces secretario general del sindicato, José Marcano.