Un tribunal egipcio emitió este lunes una nueva sentencia a cadena perpetua para el líder de los Hermanos Musulmanes, Mohamed Badía, y otros 14 dirigentes y simpatizantes islamistas, informó la agencia estatal de noticias Mena.
La Corte Penal del distrito de Guiza condenó a esas personas por su vinculación con los actos de violencia registrados en julio de 2013 en la zona de Bahr al Azam, en la capital egipcia.
Entre los condenados están los dirigentes de los Hermanos Mohamed el Beltagui, Esam al Arian y Basem Ouda, así como el predicador islamista Safuat Higazi, el responsable del grupo Gamaa al Islamiya Azem Abdel Maguid y otros nueve procesados.
La Fiscalía había acusado a los islamistas de perpetrar actos violentos, de terrorismo y asesinato; formar una organización armada para agredir a los ciudadanos y ofrecer resistencia a las autoridades, entre otros cargos.
Según el fallo, los condenados se reunieron en la acampada de Rabea al Adauiya (en la que los islamistas pidieron la restitución del depuesto presidente Mohamed Mursi desde julio de 2013 hasta su desmantelamiento el 14 de agosto de ese año) para organizar manifestaciones en las calles de Guiza y aterrorizar a los ciudadanos.
El 15 de julio de 2013, islamistas protestaron en la zona de Bahr al Azam (en Guiza), agredieron a ciudadanos y atacaron propiedades con armas, causando la muerte de cinco civiles y heridas a otros cien, agregó la agencia.
Badía, El Beltagui, El Erian, Higazi y Ouda ya fueron condenados el pasado 30 de agosto a cadena perpetua por emplear la violencia, asesinar a civiles e incitar al terrorismo y al vandalismo cerca de la mezquita de Al Istiqama tras el golpe de Estado que derrocó a Mursi el 3 de julio de 2013.
El guía supremo de los Hermanos ya recibió una condena a muerte el pasado 21 de junio por un tribunal de la provincia de Minia (sur), junto a 182 islamistas, una decisión que fue recurrida por la Fiscalía.
Desde el derrocamiento de Mursi, las autoridades han perseguido a los miembros y líderes de los Hermanos Musulmanes, a los que han calificado legalmente de grupo terrorista.
Los islamistas, por su parte, se niegan a reconocer el proceso político actual e insisten en la restitución como presidente de Mursi.
La Corte Penal del distrito de Guiza condenó a esas personas por su vinculación con los actos de violencia registrados en julio de 2013 en la zona de Bahr al Azam, en la capital egipcia.
Entre los condenados están los dirigentes de los Hermanos Mohamed el Beltagui, Esam al Arian y Basem Ouda, así como el predicador islamista Safuat Higazi, el responsable del grupo Gamaa al Islamiya Azem Abdel Maguid y otros nueve procesados.
La Fiscalía había acusado a los islamistas de perpetrar actos violentos, de terrorismo y asesinato; formar una organización armada para agredir a los ciudadanos y ofrecer resistencia a las autoridades, entre otros cargos.
Según el fallo, los condenados se reunieron en la acampada de Rabea al Adauiya (en la que los islamistas pidieron la restitución del depuesto presidente Mohamed Mursi desde julio de 2013 hasta su desmantelamiento el 14 de agosto de ese año) para organizar manifestaciones en las calles de Guiza y aterrorizar a los ciudadanos.
El 15 de julio de 2013, islamistas protestaron en la zona de Bahr al Azam (en Guiza), agredieron a ciudadanos y atacaron propiedades con armas, causando la muerte de cinco civiles y heridas a otros cien, agregó la agencia.
Badía, El Beltagui, El Erian, Higazi y Ouda ya fueron condenados el pasado 30 de agosto a cadena perpetua por emplear la violencia, asesinar a civiles e incitar al terrorismo y al vandalismo cerca de la mezquita de Al Istiqama tras el golpe de Estado que derrocó a Mursi el 3 de julio de 2013.
El guía supremo de los Hermanos ya recibió una condena a muerte el pasado 21 de junio por un tribunal de la provincia de Minia (sur), junto a 182 islamistas, una decisión que fue recurrida por la Fiscalía.
Desde el derrocamiento de Mursi, las autoridades han perseguido a los miembros y líderes de los Hermanos Musulmanes, a los que han calificado legalmente de grupo terrorista.
Los islamistas, por su parte, se niegan a reconocer el proceso político actual e insisten en la restitución como presidente de Mursi.
EFE