Cerca de 805 millones de personas pasan hambre en el mundo, pero incluso más del doble, hasta 2.000 millones de personas, sufren de malnutrición o "hambre oculta", según el Índice Global del Hambre (GHI) de 2014, presentado este lunes en Berlín.
La principal causa de la malnutrición, caracterizada por la ingesta insuficiente de vitaminas, minerales y nutrientes, que debilita el sistema inmunológico y eleva la mortalidad infantil, es sobre todo la pobreza.
En 16 países, entre los que figuran Irak, Suazilandia, Comores y Burundi, la situación de hambruna es "muy grave" o "alarmante", indica el informe.
"Conflictos como los de Siria, Irak o Sudán del Sur ponen en peligro la situación alimentaria en estos países. Los refugiados se ven expuestos a una mayor amenaza de inseguridad alimentaria, malnutrición y enfermedades", indicó Bärbel Dieckmann, presidente de la ONG Welthungerhilfe (Ayuda Mundial contra el Hambre).
Irak, donde el porcentaje de personal con malnutrición es más del doble que en 1990, ocupa el penúltimo lugar entre todos los países en el índice de este año.
La violencia constante, el gran número de desplazados en el país y la afluencia de refugiados procedentes de Siria, así como la calidad de las necesidades básicas, que empeora año tras año, agudizan esta situación, indica el informe.
La difícil situación en Suazilandia encuentra su explicación en la propagación extrema del virus del VIH, que afecta al 26,5 % de la población adulta, señalan los expertos.
En tanto, Burundi está todavía en el lento proceso de recuperar la estabilidad política y la paz tras décadas de guerra civil.
Según Dieckmann, a todo ello "se suma la epidemia de ébola en África occidental, que influirá de forma considerable en los próximos meses en la situación alimentaria de los países afectados".
"El mundo debe estar ahora más unido para enfrentarse a este desafío. Necesitamos el valor para una solidaridad incondicional", advirtió.
No obstante, el informe muestra también que el GHI retrocedió un 39 % desde 1990 en los países en vías de desarrollo.
Así, un total de 26 países, entre los que figuran Brasil, Perú, Angola, Benin, Gana, Camboya, Malí, Tailandia y Vietnam, vieron reducidas sus puntuaciones GHI a la mitad o más.
"La lucha contra el hambre y la malnutrición debe avanzar consecuentemente en el siglo XI. El fin de semejante dimensión de sufrimiento humano crea la oportunidad para millones de personas de llevar una vida sana y plena", subrayó Klaus von Grebmer, investigador del Instituto Internacional de Investigación sobre Políticas Alimentarias (IFPRI, por sus siglas en inglés).
El Índice Global del Hambre, que se actualiza cada año, es una herramienta diseñada para medir y dar seguimiento de manera comprehensiva al hambre a nivel mundial y también por países y regiones.
El GHI es publicado de forma conjunta por el IFPRI y las ONG Concern Worldwide irlandesa y Welthungerhilfe alemana.
EFE