El presidente de Datanálisis, Luis Vicente León, señaló que el precio del petróleo “continua cayendo y arrastra a los bonos venezolanos” y acotó que “el país requiere urgentemente un plan de contingencia“.
Así lo dio a conocer a través de su cuenta en la red social Twitter, @luisvicenteleon, cuando escribió: “Ninguna estrategia de ajuste menor será suficiente para atender la crisis que ya teníamos, condimentada ahora por la caída de ingresos”.
“El país tiene opciones de ajuste para enfrentar la crisis. La incertidumbre es si el Gobierno está dispuesto a asumir los costos de aplicarlas”, agregó al tiempo que recalcó que “no tiene ningún sentido seguir pagando miles de millones de dólares para mantener el subsidio a la gasolina en el medio de una crisis severa”.
Sostuvo que no es suficiente reducir “los apoyos a Petrocaribe y Cuba (que ya se redujeron). El país debe suspender para concentrarse en su propia crisis” y manifestó que con la “crisis interna y el peligro petrolero, el país no está para ayudar a nadie sino para que lo ayuden”.
“Con una contracción severa de ingresos en dólares, es indispensable un ajuste cambiario severo, abierto y serio. La fusión de Cencoex y Sicad I, el desplazamiento libre de Sicad II y el reconocimiento abierto del paralelo parecen rutas racionales”.
El también economista precisó que se deben desanudar “los bloqueadores cambiarios que impiden que los convenios petroleros con privados se concreten en aumento de la producción. La capacidad del gasto público para mover la economía y crear ambiente de crecimiento en este momento es nula y contraproducente”.
“Los costos no son del ajuste sino del no ajuste. Ningún subsidio en dólares llega eficientemente al pueblo, se queda siempre en el camino por ineficiencia y corrupción. El país necesitará subsidios en bolívares para atender a la población más pobre que será afectada por los cambios indispensables”, sumó.
Además, expresó que “se puede tratar de meter en el disfraz que quieras, pero por dentro más vale que sea un ajuste económico serio o la crisis nos devora. La única manera de que estuviéramos preparados para una caída del petróleo es que las colas que hoy hacemos sean un simulacro preparatorio“.
“Frente a una crisis es aún más importante el fortalecimiento de alianzas inteligentes entre el sector público y el privado para enfrentarla. Sin estímulo a la producción privada no hay absolutamente ninguna posibilidad de éxito económico”, argumentó.