El presidente de la patronal de las pymes (Cepyme) y vicepresidente de CEOE, Jesús Terciado, ha comunicado al Comité Ejecutivo de la patronal española su decisión de dejar la presidencia "temporalmente". Su renuncia llega después de que un juzgado imputase a la cúpula de la patronal de las pymes por fraude debido a sus cobros opacos. Aunque oficialmente no tenía sueldo, Terciado facturó en 2011 y 2012 a través de sus empresas a 313.320 euros a Cepyme, como denunció la patronal de Salamanca (Confaes). Terciado justifica que renuncia para no enturbiar el proceso electoral en CEOE, que celebrará elecciones a la presidencia el próximo 17 de diciembre.
Terciado ha anunciado que se aparta pese a no encontrarse inmerso "en ninguno de los supuestos que contempla el Código Ético y de Buen Gobierno vigente en CEOE y en Cepyme", pero sostiene que intenta evitar "cualquier intento de instrumentalizar" en el proceso electoral de CEOE.
La decisión llega una semana después de que el juzgado de Madrid que instruye el caso citara como imputados por fraude al expresidente de Cepyme Jesús Bárcenas, al secretario general, José Alberto González Ruiz, y al gerente, José Manuel Vilar Martínez. Lo hacía después de que el fiscal viese indicios de “falsedad y estafa o apropiación indebida” en los que estos habrían sido cooperadores necesarios. El fiscal pidió también las cuentas de Ingasert y Tecrucyl los últimos años."Entiéndase ésta como una decisión firme y sincera en unos momentos en los que los empresarios, como la mayoría de los ciudadanos, esperan decisiones firmes y sinceras por parte de quienes ostentamos algún tipo de responsabilidad sujeta al criterio de la opinión pública. Y entiéndase también como una decisión que me permitirá realizar una mejor defensa de mi actuación en Cepyme ante una denuncia que considero infundada", concluye. Terciado sostiene que cree "haber actuado correctamente como presidente de Cepyme, en defensa de los intereses de las pequeñas y medianas empresas, con honradez y transparencia".
En la denuncia, representantes de la patronal de Salamanca, enfrentada con Terciado desde que este presidía la patronal de Castilla y León, asegura que durante los años 2011 y 2012, las sociedades Ingasert y Tecrucyl, ambas de Terciado, facturaron a Cepyme 313.320 euros sin haber realizado trabajos para la patronal de las pymes.
En 2011, en un juzgado de Valladolid, Terciado afirmó que no cobraba por su sueldo en Cepyme, pero tras la denuncia de la patronal de Salamanca admitió que la facturación de sus empresas era como un sueldo. “Estoy cobrando sueldo desde 2012, antes lo hacía desde la facturación de mis empresas para compensar los gastos de vivir en Madrid y por la dedicación al cargo”, reconoció a este diario.
Terciado afirma que era lo habitual en la patronal, peor su antecesor en el cargo, Jesús Bárcenas, lo niega. Este aseguró que cobraba una cantidad por gastos de representación y que era bastante menos que lo facturado por Terciado. Añadió que, en contra de lo que ocurría ahora, él no usaba la tarjeta de crédito de la patronal.
No es la primera vez que Terciado utiliza Tecrucyl para cobrar. En 2010, cuando era presidente de la patronal de Castilla y León (Cecale), esta adjudicó una jornada a un socio de Terciado por 25.074 euros. A la vez, Tecrucyl facturó a su socio 5.762 euros (equivalente al 22,9%). En esa época, la patronal también dio trabajos al grupo Tecopy por 1,63 millones en cinco años. Terciado recibió 178.440 euros de Tecopy (el 10,9%) entre 2008 y 2010. Terciado afirmó a este diario que facturó por trabajos profesionales como estudios “sobre el sector agropecuario en Brasil y Perú”, pero se negó a enseñarlos: “Son privados. Se los daré a un juez si me lo pide”.
Además, entre enero de 2009 y abril de 2012, Terciado gastó 29.920 euros con su tarjeta de la patronal y de esos hubo 2.788 euros gastados en su propia gasolinera y 4.616 euros en fines de semana. Una auditoría posterior de KPMG reveló gastos suntuosos como 4.557 euros en taxis en marzo de 2012, los 5.876 euros en unas cortinas de seda para su despacho y 4.077 euros en una mesa de cristal para el despacho del presidente. Terciado afirmó que él no se encargaba de seleccionar el mobiliario y que no pasaba las dietas, sino que la patronal le pagaba las que consideraba.Bernabé Cascón, secretario de la patronal salmantina y firmante de la denuncia, consideró que "era de justicia" la salida de Terciado. La patronal de Salamanca lleva años denunciando los dispendios de Terciado, desde que fue presidente de la patronal autonómica. Allí denunció que aunque oficialmente no tenía sueldo, Terciado cobró en mayo de 2010 dietas que sumaban 3.240 euros brutos por 18 reuniones, casi una por día laborable. Cobró dietas por reunirse con su vicepresidente o su equipo de comunicación.
La patronal salmantina lo denunció en un juzgado en Valladolid y la juez lo archivó al considerar que no existía reglamentación sobre el uso de la tarjeta y que “no se ha acreditado que se haya hecho un uso de la tarjeta totalmente al margen de los gastos derivados de su cargo”. Sobre las dietas, consideró que no había “fijado ningún límite máximo de asistencia a reuniones con derecho a dieta”. La juez apuntó que la disputa debía resolverse en el interior de la organización y no en los tribunales.
Terciado, un ingeniero técnico agrícola de Ávila, es presidente de Cepyme desde 2010, cargo que renovó en julio. Como presidente de esta organización es vicepresidente nato de la CEOE y es de facto el número dos de Juan Rosell, con quien acude a las reuniones del diálogo social con Gobierno y sindicatos.
Hasta ahora, Terciado ha sido uno de los apoyos de Rosell en su gestión. La otra candidatura, liderada por Antonio Garamendi, es crítica con Rosell. En teoría, la presidencia en funciones de Cepyme correspondería ahora a Garamendi, por ser vicepresidente primero de la patronal de las pymes.
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