Varias agencias de la ONU alertaron este jueves de la situación de hambre extremo en la que se encuentran sectores de la población en Sudán del Sur y que los coloca al borde de una catástrofe humanitaria.
Un nuevo análisis apunta a que casi 4 millones de personas a nivel nacional afrontan actualmente una grave inseguridad alimentaria.
La Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) llamaron a las partes del conflicto a garantizar acceso urgente e irrestricto al estado de Unity.
Allí se encuentran unas 30.000 personas que viven en condiciones extremas y afrontan inanición y muerte. Los operativos de asistencia en ese estado se han visto obstaculizados por la terrible violencia y la falta de acceso en los últimos meses.
Las agencias advirtieron que la inseguridad alimentaria en Unity podría deteriorarse y convertirse en hambruna.