La policía belga arrestó el viernes a otras tres personas como parte de investigaciones que han arrojado cada vez más vínculos entre los ataques de militantes islamistas en Bruselas y los de París en noviembre.
La oficina del fiscal federal dijo que la operación del viernes estaba relacionada con la detención en París el día anterior de un islamista, condenado en Bélgica el año pasado y sospechoso de planear un nuevo ataque.
Policías fuertemente armados y soldados acordonaron un área alrededor de una gran intersección en el barrio de Schaerbeek, en el norte de la capital belga. Se escucharon tres estallidos, que, según el alcalde local Bernard Clerfayt, fueron explosiones controladas.
Clerfayt dijo a la emisora pública belga RTBF que el sospechoso fue detenido tras ser herido y que estaba relacionado con los ataques suicidas del martes. El funcionario agregó que se le halló un portafolio lleno de explosivos.
La oficina del fiscal belga dijo que seis personas fueron detenidas el jueves en Bruselas, de las cuales tres quedaron en libertad y las restantes permanecían bajo custodia.
Otras tres personas fueron arrestadas el viernes tras la detención en Francia de Reda Kriket, un francés de 34 años que fue sentenciado en ausencia en julio a 10 años de prisión en Bruselas como parte de una red islamista que reclutaba militantes.
Una persona cercana a la investigación en Bélgica dijo que se creía que uno de los arrestados era el cómplice capturado en imágenes por las cámaras de seguridad del metro junto al atacante que se inmoló.
Los fiscales confirmaron la identidad del segundo atacante del aeropuerto como Najim Laachraoui, un islamista belga que combatió en Siria y de quien se sospecha fabricó los cinturones con explosivos para los atentados de París. REUTERS