(AFP) – La historia de Valentina Capuano, que estuvo entre los miles de
sobrevivientes del hundimiento del “Costa Concordia”, es particular: el
hermano de su abuela murió la noche del 14 de abril 1912, cuando el “Titanic”
chocó contra un iceberg y se hundió en alta mar.
“Fue como revivir aquella historia. Fue terrible, estoy conmocionada”, dijo Valentina, de 30 años, oriunda de Nápoles, al diario La Repubblica.
Su abuela, Maria, le hablaba a menudo de aquella terrible historia que había marcado su vida: la muerte de su hermano menor, Giovanni, que había emigrado a Londres a los 25 años en busca de trabajo.
Giovanni estaba a bordo del “Titanic” en su viaje inaugural, contratado como camarero. Él pensaba emigrar a Estados Unidos para empezar una nueva vida, pero fue una de las víctimas del desastre.
“Todavía tiemblo y pensar en lo que he vivido todavía me perturba, tengo taquicardia y aún estoy muy agitada”, dijo la joven, que sobrevivió al drama de la noche del viernes, así como su novio, el hermano de éste y su esposa.
El “Titanic”, un paquebote británico de la White Star Line, que era en aquel entonces el más grande del mundo y considerado insumergible, se hundió cerca de la costa de Terranova durante su viaje inaugural, después de chocar con un iceberg, dejando 1.513 muertos y 711 supervivientes.
El “Costa Concordia” naufragó el pasado viernes con unas 4.229 personas a bordo, a muy poca distancia de la isla del Giglio, en el oeste de Italia.
El último balance provisorio de la tragedia es de 11 muertos, 28 desaparecidos y unos 60 heridos, muchos de los cuales se rompieron brazos y piernas al saltar del barco para salvarse.
“Fue como revivir aquella historia. Fue terrible, estoy conmocionada”, dijo Valentina, de 30 años, oriunda de Nápoles, al diario La Repubblica.
Su abuela, Maria, le hablaba a menudo de aquella terrible historia que había marcado su vida: la muerte de su hermano menor, Giovanni, que había emigrado a Londres a los 25 años en busca de trabajo.
Giovanni estaba a bordo del “Titanic” en su viaje inaugural, contratado como camarero. Él pensaba emigrar a Estados Unidos para empezar una nueva vida, pero fue una de las víctimas del desastre.
“Todavía tiemblo y pensar en lo que he vivido todavía me perturba, tengo taquicardia y aún estoy muy agitada”, dijo la joven, que sobrevivió al drama de la noche del viernes, así como su novio, el hermano de éste y su esposa.
El “Titanic”, un paquebote británico de la White Star Line, que era en aquel entonces el más grande del mundo y considerado insumergible, se hundió cerca de la costa de Terranova durante su viaje inaugural, después de chocar con un iceberg, dejando 1.513 muertos y 711 supervivientes.
El “Costa Concordia” naufragó el pasado viernes con unas 4.229 personas a bordo, a muy poca distancia de la isla del Giglio, en el oeste de Italia.
El último balance provisorio de la tragedia es de 11 muertos, 28 desaparecidos y unos 60 heridos, muchos de los cuales se rompieron brazos y piernas al saltar del barco para salvarse.