(AFP) – Un resultado reñido en las elecciones de octubre en Venezuela que no sea aceptado por la parte perdedora puede desembocar en violencia, advirtió este martes una experta estadounidense y observadora del Centro Carter, Jennifer Lynn McCoy.
“Hay riesgos potenciales en ciernes, y si la elección (presidencial) es reñida, lo que será muy importante es la confianza en el sistema electoral“, dijo McCoy durante un debate celebrado en el centro de análisis Oficina de Washington sobre América Latina.
“Si el perdedor, sea cual sea, cuestiona esos resultados, eso puede abrir la puerta a que facciones radicales en ambos campos respondan de forma más violenta”, añadió.
McCoy estuvo presente en Venezuela en las recientes primarias de la oposición al presidente Hugo Chávez, que eligió como candidato único a Henrique Capriles Radonski, un abogado de 39 años.
Capriles se enfrentará al presidente Chávez, que aspira a la reelección, en los comicios del 7 de octubre.
Chávez, que se está recuperando en Cuba de unasegunda operación a causa de su cáncer, acusa a la oposición de querer desmantelar los logros de sus 13 años en el poder.Militantes opositores acusan regularmente al Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv) de Chávez de hostigarlos en sus actos de campaña.
McCoy destacó que tanto el gobierno, con su referéndum para cambiar la Constitución de 2007, como la oposición, en las elecciones presidenciales de 2006, han reconocido fracasos respectivamente, lo que sienta un precedente.
“Aceptar una derrota, eso va a ser crucial a la hora de reaccionar a las elecciones este año“, dijo la observadora del Centro Carter.
“Hay estándares para unas elecciones, pero no hay una línea clara sobre cuándo deben ser consideradas aceptables o no. Tienes que mirar todos los componentes”, dijo McCoy.