El delantero colombiano Teófilo Gutiérrez no concurrió este lunes al entrenamiento del Racing argentino, cuyo presidente, Gastón Cogorno, ha dado por terminado el ciclo del jugador en el equipo.Versiones de prensa indicaban que "Teo" se presentaría en la práctica de hoy junto con sus abogados, pero finalmente eso no ocurrió.
La prensa deportiva de Buenos Aires destaca que por estas horas los dirigentes delRacing Club definen con Efraín Pachón, representante del delantero, el futuro del colombiano.
"Es un jugador excepcional, con muchas condiciones. Vi pocos jugadores de su nivel, pero su ciclo en el club está terminado", aseguró este domingo Cogornoen declaraciones a la cadena de televisión Fox Sports.
Según la prensa, el Racing, que tiene el 20 por ciento de los derechos económicos del jugador, evalúa rescindir su contrato con causa justificada, separarlo de la plantilla o multarle, aunque con cualquiera de las tres posibilidades "Teo" no jugará más en el equipo blanquiceleste.
LOS MOTIVOS DE SU EXPULSIÓN
Gutiérrez sumó el sábado, en la derrota ante el Independiente por 4-1, su cuarta expulsión desde que llegó a Racing el 7 de febrero del 2011.
Tras el partido, de acuerdo con varios medios de prensa, el colombiano se tomó a golpes de puño con el portero Sebastián Saja y el zaguero Lucas Aveldaño, a quienes posteriormente amenazó con un arma de juguete.
Los jugadores del Racing Club le prohibieron al delantero colombiano subirse al ómnibus que los trasladó a la concentración y "Teo" debió retirarse en taxi del estadio del Independiente.
No fue el primero de los episodios de violencia que tuvo al colombiano como protagonista en el Racing Club, en el que varios jugadores han cuestionado, incluso públicamente, sus actitudes.
Gutiérrez sumó el sábado, en la derrota ante el Independiente por 4-1, su cuarta expulsión desde que llegó a Racing el 7 de febrero del 2011.
Tras el partido, de acuerdo con varios medios de prensa, el colombiano se tomó a golpes de puño con el portero Sebastián Saja y el zaguero Lucas Aveldaño, a quienes posteriormente amenazó con un arma de juguete.
Los jugadores del Racing Club le prohibieron al delantero colombiano subirse al ómnibus que los trasladó a la concentración y "Teo" debió retirarse en taxi del estadio del Independiente.
No fue el primero de los episodios de violencia que tuvo al colombiano como protagonista en el Racing Club, en el que varios jugadores han cuestionado, incluso públicamente, sus actitudes.
EFE
