El compositor dominicano Juan Luis Guerra, con 11 discos de estudio en el mercado y 9 Latin Grammys, ha considerado que su éxito, por encima de estos logros y reconocimientos, está en haberle puesto "vestido" a la bachata, género al que dice que ha ataviado con romanticismo.
"Mi bachata es rosa, es más suave y suena diferente a la tradicional de República Dominicana", asegura Guerra.
Melodía que hace que a personas que normalmente no escuchan esta música "les guste e incluso la bailen", explica el músico a Efe.
"La música es la alegría cantada", exclama Guerra, quien manifiesta que la gente a pesar de no tener dinero invierte en cultura porque les da energía positiva y se olvidan de los vaivenes de la bolsa y de la crisis económica.
No tener fronteras, gustar tanto a padres como a hijos y resistirse a las modas pasajeras son otros de los éxitos de Juan Luis Guerra, quien desmiente que haya pasado de encontrar la inspiración en el amor a hacerlo en Dios.
"Dios es mi inspiración, de él sale el amor", responde el artista, quien confiesa que desde que contactó hace 17 con el cristianismo, siempre lo ha tenido presente y que, aunque sigue haciendo canciones "sumamente románticas", sus referencias religiosas están ahora más presentes que nunca en su carrera.
"La espiritualidad es lo que me hace estar bien y en armonía, antes estaba desordenado", dice el dominicano, quien matiza que la religión la lleva siempre consigo y, aunque le aleje de algunos seguidores, es algo de lo que no puede separarse y luce con orgullo.
Entre sus retos de futuro destaca seguir sacando nuevos discos, componer música para películas y, sobre todo, hacer alguna colaboración con Paul McCartney.
EFE