Un problema de salud explicaría ausencia del probable futuro líder chino
La inexplicada desaparición pública del vicepresidente chino Xi Jinping, llamado a convertirse dentro de pocas semanas en el máximo líder del país, generaba el martes intensas especulaciones, aunque según los expertos lo más probable es que se deba tan sólo a un problema de salud.
El ministerio chino de Exteriores rechaza tajantemente dar cualquier explicación sobre las razones que llevaron a Xi a anular cuatro reuniones desde el miércoles pasado, una de ellas con la Secretaria de Estado norteamericana Hillary Clinton y otra con el primer ministro danés.
Al ser interrogado al respecto, el portavoz del ministerio, Hong Lei, se limitó a exhortar a los periodistas a plantear "preguntas serias".
La falta de explicaciones oficiales sobre esas anulaciones alimentan los rumores en internet y en los medios extranjeros. Los expertos consideran sin embargo que la explicación mas plausible es un problema de salud de Xi, de 59 años, que el octubre denería sustituir a Hu Jintao al frente del Partido Comunista (en el poder).
"El caso es probablemente más aburrido que dramático, pero se está dramatizando debido a la falta de transparencia" del régimen, opina Scott Kennedy, director del centro de investigaciones sobre China de la Universidad de Indiana, basado en Pekín.
"Nunca ha ocurrido, o al menos no ocurre desde la Revolución Cultural (1966-76), que un dirigente de primer plano salga de circulación a menos de un mes de un congreso del Partido", declaró Willy Lam, politólogo de la Chinese University de Hong Kong.
Aunque según sus contactos, Xi se lastimó haciendo deportes, y debió ser hospitalizado. "Está convaleciente, y prefieren mo mostrarlo en público", sostiene
El ministerio chino de Exteriores rechaza tajantemente dar cualquier explicación sobre las razones que llevaron a Xi a anular cuatro reuniones desde el miércoles pasado, una de ellas con la Secretaria de Estado norteamericana Hillary Clinton y otra con el primer ministro danés.
Al ser interrogado al respecto, el portavoz del ministerio, Hong Lei, se limitó a exhortar a los periodistas a plantear "preguntas serias".
La falta de explicaciones oficiales sobre esas anulaciones alimentan los rumores en internet y en los medios extranjeros. Los expertos consideran sin embargo que la explicación mas plausible es un problema de salud de Xi, de 59 años, que el octubre denería sustituir a Hu Jintao al frente del Partido Comunista (en el poder).
"El caso es probablemente más aburrido que dramático, pero se está dramatizando debido a la falta de transparencia" del régimen, opina Scott Kennedy, director del centro de investigaciones sobre China de la Universidad de Indiana, basado en Pekín.
"Nunca ha ocurrido, o al menos no ocurre desde la Revolución Cultural (1966-76), que un dirigente de primer plano salga de circulación a menos de un mes de un congreso del Partido", declaró Willy Lam, politólogo de la Chinese University de Hong Kong.
Aunque según sus contactos, Xi se lastimó haciendo deportes, y debió ser hospitalizado. "Está convaleciente, y prefieren mo mostrarlo en público", sostiene
EFE